Con la idea en mente de ingresar como miembro activo al Nuevo Banco de Desarrollo de los BRICS, el presidente Alberto Fernández se reunirá este martes con la titular de esa entidad, Dilma Rousseff, en Shanghái, China. Será un encuentro de diálogo y representará la culminación de meses de tratativas que buscan como fin último acercar a la Argentina a nuevas fuentes de financiamiento.
Además, se dará a dos meses y medio de que se haga efectiva la entrada del país el grupo de estados que conforman el 46% de la población mundial, además del 36% del PBI. Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica le darán la bienvenida a partir del próximo 1° de enero a la Argentina, Irán, Egipto, Etiopía, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, decisión que se anunció el 24 de agosto pasado.
Ese día, el Presidente lo celebró en cadena nacional y explicó que las negociaciones para entrar habían iniciado a principios de 2022. La reunión con Rousseff que tendrá lugar este martes a las 9:30 hora local (20:30 de Argentina) genera expectativa en la comitiva oficial por el alcance que podría tener un préstamo en este tramo final de la administración de Fernández.
El desempeño de Rousseff en el NDB
El Nuevo Banco de Desarrollo (NDB) fue creado en 2015 por los BRICS, con el objetivo de proporcionar una fuente de financiamiento alternativa al Fondo Monetario Internacional (FMI) y al Banco Mundial. Rousseff asumió al frente de la entidad en marzo pasado, tras la llegada de Luiz Inácio Lula Da Silva al poder en Brasil, desplazando a Marcos Prado Troyjo, un hombre que había sido designado por Jair Bolsonaro.
A principios de agosto, la presidenta del NDB aseguró en una entrevista que el banco debía contribuir al desarrollo de los estados con una financiación que no incluyera «espadas en la cabeza». En la misma línea, Lula sostuvo que la entidad creada por el BRICS debía ser más generosa y trabajar para terminar con las «grandes desigualdades» del mundo.
Durante este año, el Gobierno trabajó con el objetivo de incorporar al país como miembro activo del banco que dirige Rousseff, algo que en los hechos significaría un atajo para obtener créditos para proyectos de infraestructura y aumentar las reservas del Banco Central.
El embajador argentino en China, Sabino Vaca Narvaja, mantuvo un encuentro meses atrás con la ex presidenta de Brasil y posteriormente se mostró optimista de poder sumar al país al NBD antes de fin de año. El banco de los BRICS cuenta con un capital suscrito de 50.000 millones de dólares, autorizado por 100.000 millones y con 32.800 en ejecución entre 96 proyectos.