La Argentina podría sufrir una «hiperinflación, una fuerte devaluación y un ajuste doloroso» tras las próximas elecciones, según el pronóstico del Instituto de Finanzas Internacionales (IIF), de orientación neoliberal. La advertencia coincide con la reunión que encabezó el ministro-candidato Sergio Massa, quien intenta codearse con el círculo rojo para buscar aprobación ante el balotaje.
«La Argentina está en el borde de una hiperinflación», señaló el reporte según NA. Y advirtió que el próximo gobierno electo tendrá «dificultades para aplicar las reformas económicas destinadas a evitar una crisis». El jefe de economistas del IIF para América Latina, Martín Castellanos, indicó que un gobierno de Sergio Massa adoptará una perspectiva «gradualista» para afrontar la situación y Javier Milei una más ortodoxa, para una «economía que está al borde de la hiperinflación».
Además, agregó que los dos candidatos presidenciales «son pragmáticos para moverse al centro, para ajustar sus propuestas, y esperamos un escenario mejor, pero no sabemos si alcanzará para poner en práctica medidas muy duras y dar vuelta la situación en 2024».
El panorama de la Argentina a futuro
«No será fácil implementar las reformas tras el cambio de gobierno para corregir la situación» agregó Castellanos quien vaticinó que «habrá una fuerte devaluación en el mercado cambiario oficial y un ajuste muy doloroso», después del balotaje. El economista recordó las críticas vertidas por el IIF a la dolarización que promueve Milei, por su «difícil implementación y sus efectos colaterales, más allá de que pueda bajar rápido la inflación».
Consideró que el nuevo gobierno deberá implementar reformas profundas que «requieren un gran consenso» y advirtió que el país «es especialista en perder buenas oportunidades». Castellanos señaló que «la transición, será dura, Massa tratará de mantener la política expansiva actual, con una alta inflación que ya superó la devaluación de agosto, con más controles que afectarán las reservas internacionales y las importaciones».
«El swap con China permitirá pagar los vencimientos al FMI de esta semana, mientras las reservas internacionales son negativas. No hay duda que habrá una devaluación después de las elecciones y el FMI aceptó esta decisión», indicó el economista jefe del IIF.
Por su parte, la directora regional para América latina de McLarty Associates, Kezia McKeague, tras analizar las últimas elecciones dijo que «no se sabe qué versión de Massa se verá, si una más tradicional del peronismo o una más pragmática como Carlos Menem», mientras que en el caso de la oposición consideró que se enfrentará a un congreso muy dividido desde diciembre.