Durante los dos debates presidenciales que hubo el 1 y 8 de octubre, Javier Milei dejó en clara su postura negacionista sobre la dictadura militar. El candidato de La Libertad Avanza sostuvo que «no fueron 30.000» los desaparecidos y afirmó que en la década del 70′ hubo una «guerra» en Argentina con el ERP y Montoneros como protagonistas. Esto fue repudiado en el oficialismo y el diputado K, Daniel Gollán, relató las torturas que sufrió.
El exministro de Salud de la provincia de Buenos Aires tocó este tema durante una sesión de la Cámara de Diputados para rechazar las expresiones del dirigente liberal que tildó como «excesos» las acciones criminales de lesa humanidad cometidas por el gobierno de facto militar que tuvo lugar entre 1976 y 1983 en Argentina, la más sangrienta de la historia del país.
En su relato recordó que fue sometido a «horas y horas de picana» y golpizas que sufrió tanto él como «miles y miles de argentinos y argentinas que pasaron lo mismo». Además, aseguró que la junta Militar tenía un «plan sistemático» de persecución, secuestro, tortura y desaparición de civiles, entre los cuales se incluían militantes políticos o personas cercanas a ellos.
«Horas y horas de picana… Horas y horas de picana en la boca, en las encías, shock eléctricos, horas y horas, días y días. Me aplicaron submarino seco, hasta que se rompieron las costillas… y después siguieron, y cuando no daba más, horas parado, y cuando te caías, te golpeaban brutalmente. En una de esas golpizas me desmayé y amanecí en un baño, atado, adonde todos los que iban a orinar, me orinaban encima. Y muchísimas cosas más que ya no voy a contar», detalló Daniel Gollán para Javier Milei, según NA.
El legislador K presentó la cuestión de privilegio contra quienes «están negando, minimizando, banalizando lo que sucedió en el período más negro de la historia» y sostuvo que «no hubo ningún exceso, fue un plan sistemático, conducido y supervisado por los altos mandos de las fuerzas armadas. No banalicemos eso», reclamó el funcionario oficialista.
Por último, recordó que al quedar en libertad se exilió en Alemania, donde escuchó a gupos neonazis negar que la cifra de asesinados en el Holocausto haya sido de seis millones, un hecho que ahora sucede en Argentina: «No podemos tolerar esto. La verdad que hubo un fallo que acá se mencionó muchas veces, que fue histórico, hecho durante el gobierno de alguien a quien admiro mucho, siendo peronista: el doctor Raúl Alfonsín«, concluyó.