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POLÍTICA

La Cámara Nacional Electoral pidió trasladar el feriado del 20 de noviembre para evitar el ausentismo en el balotaje

El Día de la Soberanía Nacional podría pasarse para el lunes 27 de noviembre para evitar el ausentismo en el balotaje.

El 19 de noviembre, la Argentina deberá elegir a su nuevo presidente que saldrá de entre Javier Milei y Sergio Massa. Casualmente, un día después de los comicios, el 20 de noviembre, es feriado por el Día de la Soberanía Nacional y muchos argentinos ya habían planeado irse unos días de descanso. Sin embargo, la Cámara Nacional Electoral solicitó formalmente al Gobierno que postergue el feriado.

El motivo del pedido es para ausentismo en el balotaje previsto para el día anterior porque saben que muchos podrían irse unos días de vacaciones durante el fin de semana largo. Así mismo lo señala la nota del presidente del organismo, Alberto Dalla Vía, que le envió al secretario General de Presidencia, Julio Vitobello, en las últimas horas.

«Motiva esta solicitud la necesidad de favorecer y garantizar la concurrencia de la ciudadanía a ejercer el sufragio en dichos comicios, que se vería indudablemente afectada si se mantuviera el fin de semana extendido con el referido feriado», sostuvo el funcionario judicial en la carta que compartió NA. Por el momento, desde el Gobierno no respondieron, aunque días antes aseguraban que no cambiarían el feriado.

La postura del Gobierno

Antes del pedido de la Cámara Nacional Electoral, la portavoz de presidencia, Gabriela Cerruti, afirmó en su cuenta de X que no se iba a trasladar el Día de la Soberanía Nacional: «Ante las versiones que circulan sobre una posible modificación del feriado previsto para el próximo 20 de noviembre ante la coincidencia con la segunda vuelta electoral, el gobierno desmiente que eso esté siendo evaluado», escribió.

A su vez, en declaraciones radiales, el vicejefe de Gabinete, Juan Manuel Olmos, ratificó ayer que el feriado no se alterará porque ya se encuentra programado de esa forma por ley. «No se va a modificar. Desarmarlo es desarmarle a varios argentinos sus vacaciones y la verdad que no nos parece. Si hay argentinos que programaron sus descansos, reprogramarlo ahora me parece que traería más problemas que beneficios», argumentó.