Alfredo Leuco habló de la muerte de dos niños en manos de los terroristas de Hamas, quienes secuestraron a ciudadanos de Israel en su reciente ataque. En este caso en particular, los pequeños se encontraban secuestrados junto a su madre y, lejos de liberarlos, la familia fue ejecutada generando conmoción en la comunidad.
“Los criminales de guerra de Hamas informaron que Kfir, Ariel y su madre Shiri han muerto en cautiverio. Del padre, Yarden no dijeron una palabra. Toda la familia Bibas fue secuestrada el 7 de octubre. Todavía no lo puedo creer. Es imposible contener las lágrimas y el desgarro que se siente en el alma”, dijo Leuco a modo de introducción.
Además, el integrante de Radio Mitre expuso su pesar: “No lo puedo creer porque no se puede creer tanta barbarie y salvajismo. Esa sonrisa tan luminosa, ese incipiente cabello rojizo y esa mirada tan pura nos sigue quebrando en llanto. Kfir llevaba 54 días secuestrado”.
“ Ese bebé que despierta tanta ternura y angustia cumplió 10 meses en cautiverio de los terroristas y estaba por cumplir 11 meses. Pasó más del 10% de su vida en manos de sanguinarios que tienen secuestrados al resto de su familia y a alrededor de 150 personas más. De hecho, Kfir, su hermanito de 4 años, Ariel y sus padres, Shiri de 32 años y Yarden fueron arrancados de su casa en el kibutz el mismo día que sus abuelos, Jose Luis Silberman y Margit fueron asesinados por las llamas que prendieron los criminales de Hamas. Murieron por incineración”, agregó y dio detalles de la historia de la familia.
A continuación, Alfredo Leuco sumó un detalle estremecedor: “Sus cuerpos quedaron carbonizados. Como si esta irracionalidad fuera insuficiente, la información disponible de las autoridades israelíes es que la familia de Kfir no estaba en manos de Hamas. Ellos los secuestraron y los llevaron a Gaza. Pero parece que canjearon a la familia con otro grupito terrorista más chico pero más extremista y más cruel”.
Tajante descargo
“Los repugnantes negacionistas del holocausto y los que tienen como objetivo exterminar al pueblo judío, muchas veces, se montan en la ignorancia o la indiferencia. Así fue posible la existencia de los campos de concentración, los hornos crematorios y las cámaras de gas en la maquinaria de la muerte hitleriana”, dijo Leuco y pronunció su perspectiva sobre un tema delicado.
A modo de cierre, Alfredo sentenció: “El mundo civilizado y democrático que apuesta por la vida y el progreso en libertad, no puede permitir que se repita esa misma actitud cómplice. Con solo mirar las caritas de Kfir y Ariel y el espanto en el rostro de Shiri, alcanza para comprender todo. Quien quiera oír que oiga. Ahora resulta indispensable la aparición con vida y el castigo a los culpables».