La inflación no sólo sigue en alza en la Argentina, sino que también se registra una importante caída del poder adquisitivo en la gran mayoría de la sociedad, ya que su salario pierde frente a los aumentos. Es por ello que, según el economista Damián Di Pace, se necesitan más de 100 horas de trabajo para comprar algo tan necesario como un jean.
En comunicación con CNN Radio, el director de la consultora Focus Market arrojó datos sobre la pérdida de poder de compra por la inflación y devaluación. «Para comprar un jean, un asalariado necesita trabajar 111 horas y 46 minutos. Si lo comparamos con Brasil, son 58 minutos, en Paraguay 51 minutos. Y si nos vamos al extremo, en Chile se compra con 21 horas de trabajo y en Uruguay, con 29», expresó.
En ese sentido, explicó: «Es interesante el concepto porque detrás de los desastres macroeconómicos que vivimos, la pérdida de valor de nuestra moneda y su devaluación frente al dólar, en definitiva se nos va la vida. Las personas se dirimen entre el tiempo de trabajo y el tiempo dedicado al ocio y al descanso. Acá rompemos todos los manuales y evaluamos cuántas más horas debemos dedicar para mantener al menos la calidad de vida. Eso le pasa a la mayoría de los argentinos, independiente de su nivel socioeconómico».
En tanto que remarcó que quienes trabajaban ocho horas, ahora trabajan catorce para poder sostener su calidad de vida. «En nuestro país, se deterioró tan fuertemente el nivel de ingreso que para los bienes, que en dólares son más económicos que en otros países de la región, necesitamos más horas para adquirlos. Esto es menos tiempo para nuestras familias, a nuestro descanso y ocio», lamentó. Y agregó que esto se refleja en las personas que deben trabajar incluso los fines de semana, a efectos de poder comprar un jean o un par de zapatillas.
Comparación entre Argentina y el resto de los países
En la comparativa con otros países de la región, Di Pace sentenció que Argentina se ubica anteúltimo en casi todos, salvo en la compra de smarthphones. Esto es gracias a que en el país se realizan los ensamblados de dichos accesorios en Tierra del Fuego.
«Este informe lo hicimos hace dos años. Necesitamos más tiempo porque la devaluación del peso frente al dólar fue mayor y se encarecieron los bienes en términos de moneda dura. Por lo cual, los argentinos debieron dedicar más horas para mantener la calidad de vida y acceder a esos bienes», subrayó.
Y comentó: «Respecto de los salarios, el público le gana al privado porque están mas resguardados. Frente a una inflación del 175%, creo que fue el silencio más grande que vi en el país. Me preocupa el asalariado no registrado porque ahí estamos en un 97% de inflación, muy rezagado y con una estructura tributaria aleccionadora a que vivas en la informalidad».