Juntos por el Cambio tuvo una reunión muy importante este martes, donde se definieron puntos importantes de cara al futuro. En primer lugar, se insistió en la unidad nacional y sostener a la coalición. Por otro lado se debatió que postura tomarán los miembros de la fuerza en la presidencia de Javier Milei. En ese sentido aclararon que habrá acompañamiento, pero no cogobierno.
En un salón repleto de dirigentes de Juntos por el Cambio, los conductoras de la reunión fueron los gobernadores. Frente a todo el auditorio estaban sentados Jorge Macri, Rogelio Frigerio, Claudio Poggi, Marcelo Orrego, Gustavo Valdes, Leandro Zdero, Alfredo Cornejo, Máximo Pullaro e Ignacio Torres. Los hombres más importantes que tendrá la coalición expresaron sus ideas.
Dentro del seno de la alianza, como viene sucediendo, la disconformidad fue parte de la escena. Miradas diferentes pusieron en evidencia las disidencia políticas. Sin embargo pudieron llegar a un acuerdo y tenerlo como hoja de ruta a partir del 10 de diciembre: «Los gobernadores y legisladores de Juntos por el Cambio, tanto en funciones como electos, nos reunimos para ratificar que nuestra prioridad es reforzar la unidad y la continuidad del espacio en el nuevo tiempo político que debemos enfrentar«.
A pesar de que se observa un horizonte rupturista, los gobernadores Juntos por el Cambio recalcaron el objetivo de mantener la unión: «Queremos ser muy claros: Nuestro primer objetivo es la UNIDAD. Por eso priorizamos nuestra vocación de unidad, que no es unanimidad de criterio en todos los temas. Estamos convencidos de que ése es el único camino que nos va a hacer fuertes», indicaron.
«En el nuevo escenario político el Congreso tiene un papel preponderante. Y consideramos que hay que despojarse de cuestiones de ego, de nombres propios y pensar en una estrategia común para garantizar lo más importante, que es la unidad«, añadieron en el comunicado redactado luego del cónclave masivo.
Finalmente subrayaron que habrá una facilidad por parte del espacio para que Javier Milei haga los cambios necesarios. De todos modos descartaron hacer un «cogobierno»: «Nosotros no cogobernamos. Pero es bueno que algunos dirigentes que quieran ayudar lo hagan, porque es mejor un gobierno sólido con buenos dirigentes, que un gobierno débil. Pero eso no nos compromete ni obliga como garantes», concluyeron.