Los rumores luego de que Javier Milei fue electo presidente de la Argentina son variados. Por un lado, está la disputa sobre si podrá implementar todas las medidas que prometió y, en un plano más cercano, aparece la conformación del Gabinete que lo acompañará desde el 10 de diciembre, el cual podría tener a Patricia Bullrich al frente del Ministerio de Seguridad y Defensa.
La dirigente del PRO se mantuvo en silencio al respecto y hoy despejó algunas dudas al respecto. «No me ofrecieron nada. No hablé con ningún miembro de La Libertad Avanza sobre ningún ministerio. Dijimos esto claramente cuando decidimos tomar esa decisión de acompañar y apoyar abiertamente y llamar a votar, tomamos la decisión de que íbamos a hacerlo sin condicionamiento de cargos. Sin dudas que a partir de ahora es posible que La Libertad Avanza llame a gente de Juntos por el Cambio o al PRO, a nuestro equipo», indicó.
En este mismo sentido, remarcó que «si uno le plantea a la gente que vote a una persona, a Milei, y Milei pide una participación o ayuda para gobernar, sería incoherente no hacerlo». Frente a esto, en TN le repreguntaron sobre si tomaría el Ministerio de Seguridad : «¿No está desechado por completo?», le preguntaron en el canal.
«Si viene alguien y te dice querés estar ahí, digo que no porque no quiero estar en un lugar que ya estuve, pero si vienen y me dicen la única persona en Argentina que lo puede solucionar sos vos, me pone en una situación compleja. Si le dijimos acompañame y hoy los tres temas importantes son economía, seguridad y educación, vos decís, bueno puede ser que diga sí, no sos obtusa«, reconoció Patricia Bullrich.
Transición y futuro
Teniendo en cuenta la disputa que hay entre La Libertad Avanza y el oficialismo, Patricia Bullrich planteó que «en todas las transiciones vos tenés que reunirte en la medida que realmente la voluntad no sea tratar de tirarte el gobierno encima y dejarte responsable. El comunicado de hoy de decir mis ministros asumen el 10 de diciembre tiene que ver con eso, con decir no me hagan adelantar decisiones antes de tiempo», aseguró.
Además, le consultaron acerca de una posible devaluación del peso argentino antes que termine el mandato de Alberto Fernández y reconoció que «toda devaluación es un problema para los ingresos de la sociedad y eso no puede estar separado de un conjunto de medidas que ayuden a la gente a hacer una transición. Si la realidad te devalúa, la gente va a sufrir. Lo importante es empezar el 10 de diciembre y que las cosas estén todas atadas para salir lo antes posible de la situación en la que está la Argentina. Me da la impresión que todo lo que pase antes, que quizás lo quieren adelantar, son todas cosas negativas para el futuro», concluyó.
