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POLÍTICA

Ricardo Alfonsín: «La democracia no tiene deudas»

Según Alfonsin, la Argentina vive desde hace 40 años el mejor sistema republicano para desarrollarse, a pesar de las falencias de la política.

Ricardo Alfonsín, embajador argentino en España y diplomático alineado al gobierno de Alberto Fernández, manifestó que la democracia es el mejor sistema que tienen los países libres para poder progresar en el tiempo. Sin embargo, Alfonsín reconoció que la Argentina ha tenido problemas para construir una sociedad más justa en los últimos 40 años, al igual que la mayoría de los países de América Latina.

«En primer lugar, yo creo que la democracia no tiene deudas, porque la democracia no gobierna, no privatiza ni contrae deudas, en todo caso es la política es la que tiene deudas y ¿Con qué tiene deuda? yo diría que con la democracia social», expresó Alfonsín en una entrevista corta y concisa para la radio CNN por los 40 años de la democracia argentina.

«Desde mi punto de vista en 1983 nosotros creíamos que íbamos a avanzar mucho más en términos de construcción de sociedades justas y creo que esta es la gran deuda que tiene la política, que desde luego no es omnipotente la política. Hay cosas que dependen de una serie de factores que no controla la política, pero más allá de eso, la deuda es con la construcción de una sociedad más justa», explicó el hijo de Raúl Alfonsín, el presidente que inició la vuelta de la democracia en 1983.

«América Latina tiene niveles de pobreza que son superiores a los que creíamos nosotros cuando empezamos a recuperar la democracia, pero lo bueno es que hay muchísimos más estudiantes universitarios que en 1983, más alumnos que tienen cobertura primaria y secundaria y hoy el 90% o más de los argentinos tienen cobertura jubilatoria», aseguró el expresidente de la UCR.

Alfonsín apuesta al futuro

«En cualquier lugar del mundo la historia nos enseña que cuando había que resolver problemas difíciles como los que tenemos nosotros, bueno se apeló al diálogo y la búsqueda de acuerdos y creo que este es el desafío que tenemos adelante. Además de buscar políticos honestos, hay que hacer muchas otras cosas más para trabajar en la construcción de una Argentina solidaria, de un país en el que los ciudadanos se sientan responsables de lo que pasa con el resto de los ciudadanos», argumentó el dirigente político de 71 años.

«En España me hablan empresarios y funcionarios que están muy interesados en la posibilidad de que América Latina, no solamente la Argentina, se transforme en una oportunidad de negocios a partir de los cambios que se van a producir en el orden económico mundial», concluyó el abogado y maestro.