En apenas unos días, Javier Milei asumirá la presidencia de la Argentina tras su arrollador triunfo en el balotaje presidencial. Uno de los elementos clave en la ceremonia de traspaso de mando es el bastón, un atributo tradicional que se entrega al nuevo mandatario desde 1868 y el otro es la banda presidencial, pero ¿Qué significan estos dos elementos históricos para el pueblo argentino?
El bastón presidencial, también conocido como vara de mando, es un símbolo de autoridad y poder que se entrega al presidente en funciones durante la ceremonia de traspaso de mando. En el contexto argentino, el bastón presidencial es parte de la tradición institucional democrática y ha sido un elemento presente desde 1868.
Este atributo presidencial tiene un significado histórico y ceremonial, representando la investidura y la responsabilidad del presidente electo para liderar la nación. Su uso se remonta al presidente Domingo Faustino Sarmiento, quien fue el primero en utilizar una vara de mando. Desde 1932, se reguló el diseño del bastón, especificando que debía ser de madera Malaca barnizada, con un puño de oro de 18 quilates de 8 centímetros que incluyera el escudo nacional esmaltado.
La confección del bastón presidencial está a cargo del orfebre Juan Carlos Pallarols, un miembro de una familia de artesanos con más de seis generaciones en este oficio. El diseño y la elaboración del bastón han pasado por sus manos desde 1982, salvo el que recibió Mauricio Macri en 2015. Cabe mencionar que, a diferencia de la banda presidencial, la entrega del bastón no está reglamentada jurídicamente y su fabricación está vinculada únicamente a fines protocolares y simbólicos.
Durante la ceremonia de traspaso de mando, la entrega del bastón presidencial simboliza el acto formal de transferencia de poder y responsabilidades de un presidente saliente a su sucesor recién electo, marcando el inicio oficial de su mandato presidencial.
¿Qué significa la banda presidencial que recibirá Milei?
La banda presidencial es otro elemento distintivo en la ceremonia de traspaso de mando, que representa la autoridad y continuidad del cargo presidencial. Este atributo es otorgado al nuevo presidente como una insignia que simboliza la investidura del máximo cargo ejecutivo. La banda presidencial es típica en muchos países, especialmente en naciones de origen latino, y se utiliza como un símbolo de la responsabilidad que conlleva el ejercicio del poder presidencial.
En el contexto argentino, la banda presidencial tiene una relevancia particular, ya que está regulada por una norma jurídica específica, el Decreto Nacional N.º 10302/1944. Este decreto establece los colores, la posición y el diseño que debe tener la banda presidencial. Su origen se remonta a la Asamblea Constituyente en la Reforma del Estado Provisorio del Gobierno del 26 de enero de 1814 y fue consolidada con la distinción del 25 de febrero de 1818.
En la ceremonia de traspaso de mando, la colocación de la banda presidencial en el nuevo mandatario es un momento simbólico que marca oficialmente el inicio de su periodo presidencial y simboliza la transferencia de la autoridad presidencial saliente al recién electo presidente.
