Un reciente estudio llevado a cabo entre estudiantes secundarios ha arrojado luz sobre un nuevo efecto secundario relacionado con el uso intensivo de las redes sociales a través de los celulares: la anhedonia. Este fenómeno, que se refiere a la incapacidad para experimentar placer, ha afectado significativamente a más del 50% de los jóvenes encuestados.
El equipo de investigadores, compuesto por educadores y neurocientíficos, seleccionó a 517 estudiantes de entre 15 y 17 años de colegios secundarios pertenecientes a la Red Itínere. Los participantes fueron sometidos a cuestionarios sobre el uso de pantallas y diversos tests para evaluar síntomas de ansiedad, depresión y anhedonia social.
Los resultados revelaron que el 51,26% de los estudiantes experimentó un índice significativo de anhedonia, lo que sugiere una relación directa con el tiempo dedicado a las redes sociales a través de dispositivos móviles. Sorprendentemente, el tiempo promedio dedicado a las pantallas fue de 5 horas y 20 minutos diarios, equivalentes a un día y medio de atención a la semana.
Luis Combal, director de la escuela secundaria Northfield, donde se realizó el estudio, destacó que el uso intensivo del celular está modificando la forma en que los adolescentes experimentan gratificación y placer. Además, uno de cada tres participantes admitió tener conductas compatibles con consumos problemáticos, como llevar el teléfono a todas partes y sufrir dolores físicos relacionados.
Entre las aplicaciones más utilizadas se encuentran TikTok (50,67%), WhatsApp (22,16%), Instagram (14,26%) y YouTube (5,39%). Ante esta realidad, los expertos sugieren intervenciones para fomentar la diversificación del entretenimiento y concientizar sobre los riesgos del uso excesivo del celular. Se destaca la importancia de promover el uso controlado y la reducción voluntaria del tiempo dedicado a las pantallas, así como brindar información y charlas preventivas desde edades tempranas en escuelas.
Celulares y redes sociales: recomendaciones de los especialistas para evitar la anhedonia
El estudio sobre la anhedonia relacionada con el uso intensivo del celular en adolescentes ha resaltado la necesidad de implementar estrategias efectivas para mitigar estos efectos y promover la salud mental. Diversificación del entretenimiento: fomentar actividades alternativas al uso de dispositivos electrónicos, como el deporte, la música y la interacción social en persona. Estimular la participación en actividades que promuevan el disfrute y el contacto humano real.
Prevención desde la escuela primaria: Implementar programas educativos que informen a los niños sobre los riesgos asociados con el uso excesivo de dispositivos móviles. Introducir charlas y talleres que aborden temas como grooming, uso racional de la tecnología y los riesgos del abuso desde edades tempranas.
Concientización sobre el uso racional: destacar los problemas que pueden surgir debido al uso excesivo de pantallas y redes sociales. Promover la importancia de mantener un equilibrio saludable entre la vida en línea y la vida fuera de línea. No comer con el celular en la mesa: fomentar prácticas que preserven la calidad de las interacciones personales, como evitar el uso de dispositivos móviles durante las comidas familiares. Esto contribuye a fortalecer los vínculos y a valorar la conexión interpersonal.
Administración controlada: reconocer la relevancia de la tecnología en la vida moderna, pero también establecer límites claros para el uso de dispositivos móviles. Promover la reducción voluntaria del tiempo dedicado a las pantallas y alentar una relación saludable con la tecnología. Estas estrategias buscan abordar el problema desde diferentes ángulos, involucrando a la comunidad educativa, las familias y los propios jóvenes para construir un enfoque integral hacia un uso saludable de la tecnología.