Con la inminente asunción de Javier Milei a la presidencia y la revelación de sus primeras medidas, los ahorristas se encuentran en la incertidumbre, preguntándose sobre el destino de las tasas de los plazos fijos en pesos. En un escenario marcado por la complejidad y la expectativa de una inflación más pronunciada hacia el alza con el nuevo gobierno, los inversores evalúan estrategias para resguardar sus ahorros.
El Banco Central (BCRA) intervino mediados de octubre, incrementando las tasas de interés para los depósitos a plazo fijo. La Tasa Nominal Anual (TNA) ascendió al 133%, con una Tasa Efectiva Anual (TEA) del 253%. En consecuencia, la tasa mensual alcanzó el 11,08%, superando la inflación de octubre 2023, que fue del 8,3%. Hasta ahora, las señales indican que la tasa podría permanecer sin modificaciones a corto plazo, con la expectativa de que el dato de noviembre del INDEC podría mantenerse alineado.
En este contexto, surgen divergencias entre analistas de la City porteña. Algunos sugieren la posibilidad de que el BCRA ajuste al alza las tasas antes del traspaso presidencial para evitar una eventual fuga de depósitos hacia el dólar, impulsada por expectativas de un tipo de cambio oficial más elevado.
No obstante, otros opinan que esta medida podría no ser implementada, considerando el tiempo limitado que resta para el cambio de administración y la inflación de octubre, que quedó por debajo del rendimiento mensual del plazo fijo tradicional (8,3% frente al 11%). El próximo dato del Índice de Precios al Consumidor (IPC) se conocerá recién el 12 de diciembre, después del cambio de mando.
Milei garantizará los depósitos y plazos fijos
La incertidumbre sobre las tasas de los plazos fijos en la era Milei ha llevado a los analistas a especular sobre el escenario postransición. Sebastián Domínguez, contador público y socio de SDC Asesores Tributarios, compartió su perspectiva en un video de TikTok, destacando la promesa de Milei de respetar los compromisos del Estado.
En este contexto, Domínguez subraya que las Letras de Liquidez (Leliqs), siendo compromisos estatales, no deberían sufrir reprogramaciones en los plazos fijos. La reducción del stock de Leliqs en los últimos días, llegando a $8 billones, ha atenuado preocupaciones que surgieron semanas atrás.
Aunque la prioridad de desarmar las Leliqs ha disminuido, los analistas coinciden en que los ahorristas no deberían experimentar perjuicios. La atención se centra ahora en cómo Milei implementará sus promesas en el manejo de las tasas y compromisos estatales, marcando el tono para la relación entre su administración y las inversiones de los argentinos.