El mega DNU de Javier Milei generó mucha repercusión dentro del arco político como también en la sociedad. Sin embargo, eso no fue todo porque el presidente fue un paso más allá y convocó a sesiones extraordinarias en el Congreso de la Nación desde el 26 de diciembre hasta el 31 de enero, pero no incluyeron dentro del temario el decreto de necesidad y urgencia.
Uno de los ejes centrales de esta decisión es que la Libertad Avanza presidirá la comisión bicameral de Trámite Legislativo y manejará la dinámica del debate. Esto quiere decir que la iniciativa ingresará al parlamento el 1 de marzo y desde ese momento podrá iniciarse el debate al respecto, lo que representa casi noventa días de trabajo para los libertarios.
Lo que ocurre es que la repercusión sobre el DNU fue, en una parte, negativa para Javier Milei y temen no obtener la mayoría simple que necesitan para aprobar el decreto. Ante esto, decidieron no incluirlo en el temario para las sesiones extraordinarias y tomarse estos más de dos meses para generar alianzas legislativas que le den los votos suficientes para su aprobación.
Un punto importante de qué pasará con este decreto está en la Unión Cívica Radical (UCR) que tiene un sector en favor de Javier Milei y otro que lo cuestiona. De esta manera, buscarán convencer al radicalismo de avalar el DNU y así quedarse con todos esos votos que, más los del PRO y La Libertad Avanza, superarían la mitad de la Cámara de Diputados y quedaría aprobado el proyecto, según NA.
Otro aspecto a tener en cuenta es que el mega decreto entrará en vigencia el 29 de diciembre y, cuanto más tiempo transcurra hasta su tratamiento, más difícil será de revertir sus efectos. Esa es una ventaja para los liberales que tendrán a Juan Carlos Pagotto como titular de la Comisión Bicameral de Trámite Legislativo, encargado de darle tratamiento a este proyecto que modifica y deroga más de 300 leyes.
La comisión bicameral de Trámite Legislativo tendrá 16 integrantes, ocho senadores y ocho diputados nacionales. La representación para cada una de las fuerzas políticas se define en función del sistema de proporcionalidad D´Hont. Para avalar la validez del dictamen se necesitan 8 de los 16 votos. Los mismos estarán repartidos de la siguiente manera: en el Senado, tres para Unión por la Patria, uno para LLA, uno para la UCR, uno para el PRO, uno para fuerzas provinciales, y uno para Cambio Federal (Juan Carlos Romero).
En Diputados Unión por la Patria reclama cuatro de los ocho lugares, aunque el oficialismo estaría dispuesto a concederle tres lugares de acuerdo al criterio de proporcionalidad. De esta manera, quedarían tres o cuatro lugares para Unión por la Patria, uno o dos para LLA, uno para el PRO, uno para la UCR y uno para Cambio Federal (Nicolás Massot).
