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ESPECTÁCULO

Juli Castro y Rodrigo Avellaneda tuvieron un duro tropiezo en el Bailando

La pareja tuvo una noche gris y obtuvo 17 puntos en el Bailando.

Bailando
El reality copa el prime de la televisión argentina.

La última pareja de la noche en el Bailando, fue la de Julieta Castro y Rodrigo Avellaneda. En este sentido, la dupla volvió a la pista, luego de diversas peleas con los miembros del jurado. Sobre todo, por la rispidez que sus padres mantuvieron con Marcelo Polino. Unos instantes luego, la pareja ingresó al estudio con un look, donde ambos lucieron llamativos overol’s de jean.

Posteriormente, la dupla se dispuso a dar lo mejor cuando comenzó a sonar la música de María Becerra en el Bailando. En este aspecto, la pareja interpretó una coreografía sin muchos trucos o acrobacias. No obstante, dispusieron de un ritmo dinámica y relativamente sincronizado. Finalmente, cabe destacar que la performance careció de un orden o lógica lineal en su ejecución.

Los puntajes de Juli Castro y Rodrigo Avellaneda en el Bailando

El primero en dar su opinión de la coreografía del Bailando fue Ángel de Brito: «A mí es un trío que me gusta, son potentes. Igual, me parece que este ritmo les está costando a todos. Quizás, es la música que es linda de escuchar, a todos nos gusta, pero por ahí cuesta encontrar una coreografía con impacto. Los 2 bailan increíble. Hasta la próxima», y terminó puntuando con un 6.

Posteriormente, Pampita protagonizó las devoluciones en el Bailando: «Bueno, no me copó tanto la temática que eligieron. Es una cosa personal, ¿no? Como que lo vi medio infantil. Tal vez, este show necesita un poco más de brillo. Esa cosa de la moto, hubo como 2 coreos. Cuidado con bailar los 2 mirando a cámara, está bueno que conecten. Necesito más química con la pareja», aseguró mientras calificaba con un 6.

En tercer lugar, Moria Casán brindó sus observaciones en el Bailando: «Me gustan ustedes. Un poco más de show, resultó como algo muy infantil. Para mí quedó en la mitad», enfatizó con un 5. Por último, Aníbal Pachano concluyó con su voto secreto: «A mí no me gustó nada. Lo que me pasa como coreógrafo, poner una moto por un sentido insignificante, no tiene sentido. En un look que no se condice con un pañuelito de zamba. Demasiado naif».