En el tercer día de gestión de Marcelo Moretti como presidente de San Lorenzo, la nueva dirigencia se encontró con el primer gran problema heredado. En las últimas horas, la FIFA le comunicó al Ciclón una inhibición y la prohibición de incorporar en este mercado de pases por una deuda que mantiene con el colombiano Yeison Gordillo.
El volante central colombiano llegó a Boedo a comienzos del 2021 desde Deportes Tolima a cambio de un millón cuatrocientos mil dólares y se marchó apenas un año y medio más tarde intimando vía Agremiados, por lo que el club luego lo liberó prometiéndole saldar la deuda en cuotas. Hecho que no sucedió y lo llevó a elevar el reclamo ante el máximo organismo del fútbol mundial.
Ahora, el cuadro azulgrana no puede inscribir contratos ni incorporar jugadores hasta resolver la situación (abonar alrededor de un millón de dólares a Yeison Gordillo) aunque si renovar préstamos. Cabe destacar que el acuerdo por Facundo Altamirano venció por lo que tampoco puede incorporar a ninguno de los dos arqueros.
Otro conflicto para San Lorenzo
Por otro lado, este conflicto se suma a los 100 mil dólares que la CD de San Lorenzo le giró a Rafael Pérez, quien intimó a la institución hace pocos días, con el objetivo de quedar libre y regresar a regresar a Junior de Barranquilla, club que lo vio nacer y con el cual tiene todo acordado de palabra. El futbolista notificó que se considera en libertad de acción pese a que todavía no venció el plazo de pago.
“Hoy nos encontramos con un club negativo en deudas, 120 millones negativos en el banco. Y tenemos que depositar 40 millones de pesos para pagar los aguinaldos. Hay que hacer una auditoría real”, había indicado Moretti en el acto de asunción que se realizó en el Polideportivo Roberto Pando.
