Maximiliano Pullaro, flamante gobernador de Santa Fe, tomó una medida importante para hacerle frente al narcotráfico. Rosario es una de las ciudades más afectadas por la comercialización y tráfico de drogas. Ante este gran problema, el mandatario provincial entrante decidió restituir pabellones de alto perfil para los narcos y sicarios. Por eso, ya recibió amenazas para su familia.
“Los jefes narcos y sicarios van a volver a pabellones de alto perfil y eso nos va a permitir tener un mayor control de estos reclusos. El objetivo es que desde los penales no se cometan delitos; esto significa que si ese preso cometió un delito grave desde la cárcel, van a hablar con sus familiares y abogados a través de un blindex y van a estar monitoreados las 24 horas”, manifestó Pullaro.
El gobernador de Santa Fe continuó explicando cuáles son las medidas a tomar a nivel penitenciario: “Vamos a volver a instalar los inhibidores, que están, y no los vamos a bajar más. Y vamos a suspender el ingreso de alimentos a las unidades penitenciarias porque no se puede requisar la entrada de alimentos de todos los presos”, indicó según NA.
“Voy a volver a dar la discusión en la Justicia para que el Servicio Penitenciario no tenga que estar requisando el ingreso de alimentos: vamos a retomar la idea de darles a los reclusos las cuatro comidas por día como se hacía en la época en la que fui ministro de Seguridad, para evitar que tengan que recibir comida desde afuera”, sumó.
La amenaza
Luego de ejecutar la medida, el mandamás de Santa Fe recibió una amenaza en la madrugada del miércoles. Dos sujetos a bordo de una moto dispararon al frente de un hospital de la ciudad. Antes de huir dejaron una nota que iba directamente contra el flamante gobernador de la provincia.
Aunque no hubo heridos o víctimas del ataque, los presentes padecieron el susto que genera una descarga de un arma de fuego. Rápidamente, quienes estaban en el lugar, encontraron un cartón que estaba escrito. El mensaje era para el nuevo gobernador de Santa Fe. Los delincuentes escribieron: «Pullaro no te metas con el pabellón 9. Te vamos a matar a tu familia».