La Ley Ómnibus y el DNU de Javier Milei ya se encuentran en el Congreso de la Nación luego de una fuerte polémica con los sindicatos. El rechazo a estas dos medidas no tardó en llegar y la CGT anunció un paro de 12 horas para el 24 de enero. En contraposición a eso, el presidente de la Cámara Argentina de Comercio, Mario Grinman, respaldó al mandatario.
«Es un cinismo total lo que están haciendo, déjenlo gobernar, denle las herramientas que le dio la historia de la democracia a todos los presidentes que asumieron y nunca le rechazaron un DNU», exigió el ejecutivo en una entrevista con NA. Además, señaló que «lo ideal es enemigo de lo posible. Hoy la Argentina tiene necesidad y sí tiene urgencia».
Seguido a esto, remarcó que «todo este DNU en proyecto de ley con el ritmo del Congreso iba a demorar 50 años. La Argentina no tiene ese tiempo, hay cosas que hay que hacerlas de forma inmediata para que el mundo vea que hacemos las cosas correctas y comiencen a llegar las inversiones para generar empleo genuino y dejar de inventar cosas para darle a la gente una sensación de bienestar que no existe».
También agregó que hay otros empresarios dispuestos a respaldar a Javier Milei, siempre y cuando la economía acompañe. «Los empresarios como todos, tenemos intereses. Algunos pensamos en el interés general del país y otros que piensan más en sus intereses personales o empresariales que en el bienestar de la población. El empresariado argentino en su inmensa mayoría es honesto y trabajador, hay como siempre algunas pequeñas excepciones. A veces es preferible resignar algo en bienestar del resto de la población pero esto cabe no sólo para el sector empresario sino para el de la política y otros».
En este marco, lanzó críticas contra la clase política por los últimos años del país: «Me horroriza ver que a un Gobierno que asumió hace 40 días ya le hacen paro general y eso no significa coartar el derecho de huelga pero hay una falta de objetividad que raya el cinismo, porque ese sector que bancó cuatro años de una gestión desastrosa sin decir ni hacer nada, ¿cómo puede ser que ahora quieran hacer un paro general?«, planteó.
El principal enemigo que tiene la Argentina es la estupidez. Cuando se pierde a objetividad, deja de pensar en el bienestar general y piensa solo en mantener los intereses personales, partidarios o ideológicos está mal y sigo con los ejemplos: en el Congreso de la Nación, el oficialismo hasta el 10 de diciembre tuvo una actuación terríblemente mala. Funcionaron poco tiempo y trataron de promover leyes que cubrieran a dirigentes que hicieran desprolijidades y que no querían que la Justicia los investigue y eso no genera bienestar a la población», arremetió.
