La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, se mostró este domingo optimista respecto a la posible media sanción que podría obtener el proyecto de Ley de ‘Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos’ en la Cámara de Diputados, luego de que el oficialismo retirara el paquete fiscal. En ese sentido, advirtió que una iniciativa así “cuanto más se demore más posibilidades se tiene de fracasar”.
“No hay que mirar tanto la letra chica de una ley, sino las circunstancias generales de una ley. Cuanto más se demore más posibilidades se tiene de fracasar”, explicó Bullrich en declaraciones a Radio Mitre. En esa línea, continuó: “Es fundamental darle el instrumento al Gobierno para hacer cambios estructurales. El objetivo es que la ley tenga media sanción el martes”, apuntó.
“Yo fui una diputada que del 2007 al 2015 era levantar la mano, o no levantar la mano porque era un Congreso hegemónico del kirchnerismo y no tenías capacidad de discutir absolutamente nada. La única vez que pudimos lograr una batalla fue cuando la gente se puso en el medio, salió en la calle, que fue cuando el (conflicto por la Resolución) 125?, acusó la funcionaria nacional.
“El país está al borde del abismo, no se puede esperar. Lo que queda (de la ley) ya tiene un acuerdo, la ley tiene una serie de cambios. Hay que respetar el acuerdo. YPF salió de las privatizaciones”, agregó la excandidata presidencial por Juntos por el Cambio. “El país no puede seguir gastando lo que gasta, porque los argentinos cada día somos más pobres. Y esto lo han entendido los argentinos y por eso votaron un cambio que lo encabezó Javier Milei y que nosotros como Junto por el Cambio lo acompañamos”, indicó.
“En el capítulo tributario, si ese capítulo seguía, era más oneroso para el Gobierno nacional, se iba a retrasar el plan de déficit cero que el Gobierno tiene y por eso decide retirarlo. No decide retirarlo porque no quiere discutir, decide retirarlo porque lo único que íbamos a lograr es que la situación compleja que tienen los argentinos se iba a alargar y se ponía entre paréntesis la posibilidad del éxito del plan”, se explayó Bullrich.
El Gobierno pospuso la sesión que estaba prevista para el jueves pasado, y la reprogramó para el próximo martes. Así, el Poder Ejecutivo, con sus espadas en el Congreso de la Nación, logró mayor tiempo para continuar acercando posiciones con la oposición dialoguista. Este cambio también fue motorizado por un pedido de estos legisladores opositores y que fue aceptado por el presidente de la Cámara baja, Martín Menem.
El viernes pasado, el ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, anunció en una conferencia de prensa la quita del capítulo fiscal que apuntalaba en el megaproyecto. Ese apartado es el que mayor conflictividad generaba porque incluía la imposición de nuevas derechos de exportación o retenciones a productos regionales y una -discutida- legislación jubilatoria.
Sobre la exclusión del capítulo fiscal del proyecto, la titular de la cartera de Seguridad aclaró: “La ley tiene varios corazones: la desregulación es un corazón fundamental, porque es simplificar en la vida de la gente. La posibilidad de privatizar empresas que dan una pérdida brutal y que hay que pagarlas todos los meses es muy importante”.
“Y la posibilidad de la reforma del Estado más profunda es algo muy importante para la Argentina, porque la Argentina tiene un Estado paquidérmico, un Estado imposible de mantener. Hay instituciones de nuestro Estado que el presupuesto de esa institución suelo se gasta en la propia institución, y el servicio que tiene que dar esa institución no sirve”, puntualizó.
