Hace años que hay un intenso debate en Argentina alrededor de la Iglesia Católica y sus influencias en el ámbito político y social. Anualmente, el Estado le otorga importantes giros de dineros a la religión para los sueldos de sus obispos y arzobispos, aunque el 31 de diciembre fue el último día de que eso ocurra porque ya no pagarán más sus salarios.
La Conferencia Episcopal Argentina compartió un comunicado en el que anunció que el pasado 31 de diciembre, concluyó el proceso que había iniciado hace cinco años para la renuncia a la asignación mensual que recibían los arzobispos y obispos. De este modo, ya no recibirán el aporte económico del Estado y únicamente obtendrán este dinero de las donaciones de los creyentes.
«La Conferencia Episcopal Argentina comunica que el último día hábil de diciembre de 2023, concluye, conforme a lo establecido en Asamblea Plenaria e informado a la Secretaría de Culto, el proceso de renuncia de los arzobispos, obispos diocesanos y obispos auxiliares a la asignación mensual prevista en la ley 21.950″, informaron en el escrito que difundieron en su cuenta de X.
En este mismo sentido, añadieron que «en una resolución del día 26 de abril de 2023, el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto en uso de sus facultades, dio lugar a que los arzobispos y obispos que hayan cesado en sus cargos por razones de edad o de invalidez puedan solicitar de manera particular, con una serie de requisitos, recibir el beneficio de la asignación prevista en la ley. El monto actual de la asignación es de $ 98.000«.
Hace cinco años, cuando comenzó este proceso, definieron esta renuncia a los aportes estatales como «un gesto que hemos anunciado al Pueblo de Dios y a la sociedad en general, ante los cuáles hemos empeñado la credibilidad de nuestra palabra». Como si eso fuera poco, aseguraron que cambiaron el dinero de la administración pública por «alternativas basadas en la solidaridad de las comunidades y de los fieles, asumiendo el espíritu de las primeras comunidades cristianas, que ponían lo suyo en común»-