Sigue el calor extremo durante el fin de semana. Por eso el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) renovó para este sábado sus alertas por altas temperaturas para zonas de al menos ocho provincias ubicadas en el centro y en la región de Cuyo y la Patagonia.
Rige, entonces un alerta amarillo para el sur de la provincia de Buenos Aires, todo La Pampa menos el norte, todo Mendoza, centro de San Luis, sur de San Juan, todo Neuquén, todo Río Negro y cordillera de Chubut. El norte, una de las regiones más afectadas por la ola de calor de verano, no recibirá el impacto de esta nueva este fin de semana.
En tanto, el aviso sube a alerta roja para la parte del sur de la provincia de Buenos Aires, oeste de La Pampa, noreste de Mendoza, este de Neuquén y norte de Río Negro; y a alerta naranja para el este de Mendoza, parte del este de Neuquén, centro de Río Negro y cordillera de Chubut.
¿Qué implican cada una de las alertas?
El alerta de nivel amarillo establece un efecto leve a moderado en la salud, de acuerdo al sistema del SMN. Implica, en este caso, que las temperaturas pueden ser peligrosas, sobre todo para los grupos de riesgo, como niños y niñas, personas mayores de 65 años y personas con enfermedades crónicas. En tanto, el alerta naranja implica un efecto moderado a alto en la salud, por lo que las temperaturas pueden ser muy peligrosas, especialmente para los grupos de riesgo.
La advertencia de nivel rojo significa que el calor puede tener un efecto alto a extremo en la salud. En este caso, las temperaturas son muy peligrosas, y pueden afectar a todas las personas, incluso a las saludables, si se está expuesto sin ventilación e hidratación suficientes.
Otras recomendaciones que ofrece el SMN son evitar las bebidas con cafeína, con alcohol o muy azucaradas, evitar comidas muy abundantes, ingerir verduras y frutas, reducir la actividad física y usar ropa ligera, holgada y de colores claros; sombrero, anteojos oscuros. Cabe recordar que no existe un tratamiento farmacológico contra el golpe de calor y sólo los métodos clásicos, citados arriba, pueden prevenirlo y contrarrestarlo.
