La última jornada de la Serie A, la liga de primera división del fútbol de Italia, dejó una escena por demás curiosa que protagonizó un futbolista argentino. Se trata de Agustín Martegani, ex San Lorenzo, que ahora milita en la Salernitana. Su equipo enfrentaba a la Juventus. Y cuando el argentino se disponía a entrar al campo de juego, su entrenador, Pippo Inzaghi, se volvió loco con él.
A los 87 minutos, cerca del final, Inzaghi mandó a la cancha a Martegani para sostener el empate 1 a 1. Pero el argentino no podía entrar al campo porque usaba una pulsera, algo prohibido por reglamento. Al icónico exdelantero del Milan le estalló la bronca y lo tomó del brazo a Martegani, diciéndole de todo en frente del público y hasta causando risas en el cuarto árbitro.
La reacción de Inzaghi con Martegani se hizo viral. Y para mala suerte de ambos, Juventus terminó ganando el partido sobre la hora con un gol de Vlahovic. De esa forma, el equipo de Turín logró acercarse al Inter de Lautaro Martínez, que lidera la tabla de la Serie A con 48 puntos contra 46 de la Juve. Salernitana, por su parte, marcha último y en zona de descenso con solo 12 puntos.
El enojo de Dybala con un rival
La Roma empató 1 a 1 con Atalanta en un duelo clave entre dos equipos que aspiran a meterse en el lote de los de arriba para clasificarse a la próxima Champions League. Dybala hizo el gol de penal del empate con una gran definición que venció la resistencia del arquero del equipo de Bérgamo. Y en el festejo, además de apurarse a agarrar la pelota para seguir el juego, se acordó de un rival.
Teun Koopmeiners es un neerlandés que juega en Atalanta. El mediocampista parece que molestó y provocó a Dybala antes del penal esperando que fallara. Y el argentino le anotó la patente. Cuando llegaba a la mitad de la cancha, el zurdo le tiró un pelotazo y al pasar le dijo algo poco amigable. Koopmeiners no reaccionó y el asunto quedó ahí, pero el video se viralizó rápidamente.