Señalada como “la detective de los famosos” Juariu logró hacerse un lugar en los medios, y en medio del excelente momento laboral que atraviesa, la influencer debutó en La casa, el nuevo programa de streaming conducido por Zaira Nara y Lizardo Ponce. En su primera semana, la panelista de Corta por Lozano (Telefe) se animó a hablar de un tema muy íntimo.
Siempre sincera con sus seguidores, Juariu se animó a contar que sufre de una fuerte adicción. «Por día me puedo comer 8 mandarinas. Me levanto a la mañana. Como fruta con mate y no me hace nada. La aprieto en la mano, ¿Entendés? Me encanta el olor a mandarina. Me gusta el olor a mandarina criolla. Es como que tengo una adicción”, reveló la influencer.
Sin embargo, esa confesión no parece haber sido suficiente para Juariu, que luego recordó un traumático episodio de su infancia. «Cuando era chica a la salchicha le comía la piel nada más. Iba a la heladera, estaba la salchicha y a mi me mamá no le gustaba porque yo le comía solo la piel. No me gustaba lo de adentro. La ponía a la salchicha en la casita de la Barbie”, contó.
«La iba escondiendo a las salchichas ahí para que mi mamá no vea. Mi hermana era chica, iba a jugar a la casita y de repente empezó a gritar”, agregó Juariu, mientras sus compañeros la escuchaban atónitos. Finalmente fue Zaira Nara quien logró cortar con el silencio incómodo: “Te podría haber agarrado botulismo. ¿No era más fácil comer chicle?”.
Una figura de Telefe fue escrachada
«Julieta Poggio, enfurecida. Se presentó en una clínica de la zona de Saavedra para intentar sacarse los puntos del ojo lastimado porque se va a Punta del Este de vacaciones. Fue atendida en el consultorio número 21 y le negaron la extracción de la sutura, lo que ocasionó la molestia y el llanto de la joven. Una recepcionista le pidió una foto y la ex GH se la negó de mala manera”, relató un usuario en las redes sociales.
Al llegarle la noticia, Julieta Poggio saltó enfurecida y aclaró los tantos. Desde sus historias de Instagram, la actriz manifestó: “Esta persona no solo merece un simple escrache por lo irrespetuoso y poco profesional de su parte por subir imágenes mías en un hospital, sino por lo mentiroso que es. Él no sabe lo que pasó adentro del consultorio”.
“Lo único que hice fue tener una consulta, acompañada por mi mamá y mi mejor amiga. ¿Desde cuándo es noticia tener un accidente? Asco me dan los medios y los mediocres como este salame que se cuelgan de estas cosas e inventan con tal de un click. Igual, tranqui, todo en la vida le vuelve a esta gente mala leche”, concluyó Julieta Poggio, cansada de que violen su intimidad.
