Connect with us

Hola, qué estás buscando?

ESPECTÁCULO

Un participante de Gran Hermano se sinceró al contar su dura historia de vida: «No me creían»

El joven abrió su corazón frente a un compañero.

Gran Hermano
Gran Hermano

A medida que van pasando los días, los participantes de Gran Hermano van abriendo su corazón y compartiendo algunos detalles de sus historias de vida. Días atrás, Lucía Maidana sorprendió al revelar que fue abusada sexualmente. Pero ella no fue la única, ya que, el martes en el debate compartieron un momento en que Emmanuel Vich se sinceró al contar su dura historia de vida.

Durante la tarde del martes, Emmanuel estaba conversando con Joel, con quien se hizo muy amigo, en el sauna. En un momento, Joel quiso indagar en la historia de vida de su compañero, y él decidió abrir su corazón. «Nací en Córdoba Capital, pasé una infancia que las cosas lindas que me acuerdo era que mi mamá me ponía Yuya. Me gustaba desde ya esa edad, creo que yo ya era gay, o sea sí, nací así«, comenzó contando.

«Después empezaron los conflictos matrimoniales. No teníamos un peso partido a la mitad, comíamos lo que nos daba mi abuela», detalló Emmanuel. En ese momento, sorprendió al revelar: «íbamos a la casa de un primo que abusaba de mí, nunca dije nada. Después, a los 9, también otra persona, amigo de la familia. Pasó el tiempo, no se hablaban de esas cosas antes, no me creían, porque yo eso lo conté a los días. No me creyeron, me vieron como ‘no, imposible’«.

Posteriormente, Emmanuel continuó compartiendo su historia: «Empecé a crecer, tuve 11 o 12 años, ellos (los padres) empiezan a separarse, no sé si se peleaban por mí o porque era gay. Ahí fue cuando me fui, me fueron en realidad, onda ‘si no te gusta esto, te vas’«. Sin poder creer lo que estaba escuchando, Joel comentó que «te vas a los 13 años de tu casa… No tuviste más relación con tus viejos, ¿hasta cuándo?».

«De más grande, cuando me casé con el Nico, fue gracias a Nico«, afirmó Emmanuel. A lo que Joel le consultó si durante todos esos años no tuvo contacto, y su compañero explicó que «me contaban mis hermanas cosas… Encima yo re quería estar con ellos, con mi vieja más que todo. Yo quiero un beso, un abrazo, que me diga ‘hijo, está todo bien’ o que me diga ‘perdón, perdón porque sufriste todas esas cosas’. Me encantaría«.