Los gobernadores peronistas se preparan para remover a Alberto Fernández de la presidencia del Partido Justicialista, si es posible incluso antes que aterrice en Buenos Aires este viernes. Enterados que el expresidente planea regresar al país, decidieron convocar a una reunión del PJ y apurar la decisión.
En lo inmediato no se descarta remover a Fernández de su cargo de presidente este mismo jueves y conformar una Comisión de Acción Política que se encargue de conducir al PJ durante su proceso de normalización. La idea, afirmaron a La Política Online fuentes al tanto de las negociaciones, es sumar a esa mesa de conducción a dirigentes del Frente Renovador de Sergio Massa; del gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, y de la CGT.
Pero del entorno del exministro de Economía buscaron tomar distancia de la jugada, aunque no descartaron sumarse al PJ. «Sergio se va de viaje en 10 días por dos semanas», afirmaron. La estrategia se habría conversado en las últimas semanas, pero se aceleró ante el retorno de Fernández, acaso alertado de la destitución que se avecinaba.
«Alberto llega el viernes y pretende convocar al PJ para la semana que viene», confiaron fuentes al tanto de sus intenciones, y agregaron: «llega el viernes a la mañana y dice que va a sacar la convocatoria el viernes por la tarde». El plan de los gobernadores sería tramitar el pedido a través del Congreso Nacional del partido, conducido por el formoseño Gildo Insfrán.
Los gobernadores buscan terminar con un modelo de conducción basado en las decisiones de una sola persona, un eufemismo para referirse a Alberto Fernández, pero que también alcanza en algunos casos a Cristina Kirchner. «La carta de Cristina a Javier Milei es un alerta para dirigentes peronistas que pensaban que ella se iría a El Calafate», reconoció un senador peronista de buen diálogo con la expresidenta.
Un colaborador de un gobernador del norte agregó: «O los del Instituto Patria entran al peronismo o el peronismo define el rumbo sin el Instituto Patria». La frase anticipa una pulseada por la integración de la nueva conducción del partido, más que una decisión de romper con el kirchnerismo. Por lo pronto, Alberto tenía mandato como titular del PJ hasta abril de 2025.