Realmente muy fuerte fue lo que se vivió en «Desayuno Americano», el programa que lleva adelante Pamela David a través de la pantalla de América TV. Allí, se pudo escuchar el testimonio de Raquel Morales, perteneciente a la Fundación Juguemos y Caminemos Juntos, quien decidió contar parte de su historia de vida.
«La fundación está hace 5 años, tenemos a 33 niños en tránsito, nucleamos familias en tránsito. Mi historia me llevó a esto, desde muy niña me hubiera gustado ser judicializada y vivir en un hogar con mis hermanas», comenzó diciendo delante de cada uno de los televidentes.
«Yo tenía un hogar amoroso, lleno de vida, de respeto hacia el niño, algo que a veces no pasa. Nosotras somos tres hermanas, fuimos separadas. Mi familia era acomodada pero el dinero no lo hacía suficiente. Nos separaron cuando tenía 12 años. Yo soy peruana y allí no existe el programa de ‘familias en tránsito'», aseveró.
«Tenía amigas mías que me llevaban a pasar el fin de semana, porque me quedaba sola. Mamá estaba enferma. Yo soy la hermana mayor, en ese momento una de mis hermanas tenía 5 y la otra 2. Sin saber que hoy me convertiría en este puente… hoy puedo sentirlo. No solamente es pedir dinero, es tener todo», sostuvo Raquel delante de Pamela David.
Inmediatamente, decidió ir por más. «A mí me sacaron del país y mi familia no se dio cuenta, creían que hacían lo mejor. Hicieron leña nuestros corazones, fue muy difícil restaurar nuestras vidas. Después no podemos con nuestros matrimonios, con nuestras vidas. Nosotros creemos que uno de los derechos del niño es vivir en contexto de familia», aseveró.
«Nuestros hogares están diseñados para poder tener el derecho a una familia. Yo encontré en este país las personas más solidarias del mundo, amo a este país. Quiero resaltar esto positivo, la gente es solidaria. La gente se suma a este sistema y se convierten en familia de la fundación para poder acompañar a un niño desde que llega hasta que se resuelve su situación», finalizó.
