La vida de las personas es otra a partir del momento en que ingresan a la casa de Gran Hermano. Sin embargo, la oportunidad de brillar en la TV no llega para todos. Puesto que, Camila Lattanzio participó en la edición de 2022-2023 y denunció a la producción del programa. Puntualmente, la modelo afirma que nunca pudo llegar a un acuerdo para formar parte de las emisiones especiales ni de las reuniones de ex’s.
En este sentido, la ex participante de Gran Hermano se despachó contra la producción a través de su Twitter. Además, la modelo expresó: «Digan que quiero cámara, lo que sea. Esperé un año para que la producción se comporte bien conmigo. Y lo único que hizo fue bajarme un montón de trabajo y no poder seguir como todos lo hicieron. Quede entre las 5 y ni siquiera me dieron el lugar para estar en la noche de los ex. Ya me tiene cansada todo lo que les venden», comenzó.
Por otro lado, la modelo en diálogo con «La Nación», aseguró que le podría haber sumado mucho al reality. En este aspecto, manifestó: «Siento que se busca la atención hacia algunos y no se muestra todo lo que se tiene que ver. Yo pude haber sido muy divertida, haber contado cosas importantes de mi vida o haber hecho estrategias de juego, pero si no las mostraban, la gente no me iba a conocer», concluyó la ex Gran Hermano.
El teléfono rojo terminó de configurar la placa de nominados en Gran Hermano
Luego de que se definiera la placa de nominados en Gran Hermano, Santiago del Moro dio la entrada al temible teléfono rojo. En este sentido, Martín fue quien llegó al teléfono y rápidamente, el conductor le aseguró que podía subir a 3 personas a placa. Sin embargo, «El Chino» se sentó a reflexionar sobre a qué personas subir y como lo podría beneficiar.
Posteriormente, después de algunos minutos, Martín reflexionó sobre a qué personas añadiría a placa, considerando que él también estaba ahí. En este aspecto, todo Gran Hermano contuvo la respiración. Mientras el «Chino» mandaba a placa a: Nicolás, Bautista y Emmanuel. Se suman a ellos, Martín, Virginia, Lisandro y Joel; uno de ellos abandonará la casa el lunes.
