Aerolíneas Argentinas anunció que los pasajeros que viajen con pasajes pagados por el Estado dejarán de acumular millas para su uso personal en vuelos particulares a partir de 1 de marzo. Esta medida busca eliminar la posibilidad de beneficiarse personalmente con promociones obtenidas en viajes oficiales financiados por las arcas públicas.
De acuerdo a datos de la agencia NA, durante el año 2023, la aerolínea de bandera otorgó cerca de 80 millones de millas a personas que viajaron con pasajes adquiridos por los tres poderes del Estado y otras entidades públicas. Estas millas se canjearon por más de 10,000 tickets de uso personal, incluyendo 1,000 en clase ejecutiva. El costo de este beneficio ascendió a más de $2.364 millones de pesos, aproximadamente equivalentes a US$2,7 millones al valor de mercado actual.
La compañía argumenta que esta práctica generaba un pasivo en dólares para Aerolíneas Argentinas, ya que las millas provenían de pagos del Estado y generaban una deuda en la misma moneda. La nueva política se alinea con el objetivo de la aerolínea de mejorar la productividad y eficiencia en el uso de sus recursos técnicos y humanos.
El mejor enero de Aerolíneas Argentinas: récord histórico en venta de pasajes
A pesar de estos ajustes, Aerolíneas Argentinas destaca un éxito continuo en su rendimiento operativo. Durante enero, transportó a más de 1.3 millones de pasajeros, marcando el mejor enero en la historia de la empresa. La puntualidad también mejoró significativamente, aumentando en 11 puntos porcentuales respecto a diciembre, alcanzando un 81%.
Para febrero, la proyección sugiere que la empresa cerrará el mes con un aumento del 4% en la cantidad de pasajeros transportados en comparación con febrero del año anterior, superando los 1,050,000 pasajeros.
La eliminación de la acumulación de millas para funcionarios públicos no solo busca mejorar la situación económica de Aerolíneas Argentinas, sino que también aborda cuestiones éticas relacionadas con el uso responsable de recursos estatales. Este cambio refleja la adaptación de la aerolínea a las circunstancias económicas y destaca la importancia de la transparencia y la eficiencia en la gestión de empresas estatales.