Javier Milei se refirió a la polémica de los últimos días que lo tuvo como protagonista junto a Lali Espósito. El Presidente argumentó que el cruce con la artista tuvo que ver con una explicación general y no es particular. También insistió en el resultado negativo que tuvo la Ley Ómnibus en la Cámara de Diputados a pesar de que lo vio como un «éxito».
El jefe de Estado se vio envuelto en un cruce con la cantante Lali Espósito durante los últimos días. Para justificar su ataque a la artista, Javier Milei explicó que se debió a su intento de transparentar cómo funciona la cultura con el populismo: «Vos lo personalizás en un caso para que se entienda la discusión de fondo. El problema de la decadencia argentina es de índole moral y cultural. Ese conjunto de valores que Argentina abrazó en un momento, te lleva al fracaso», comentó en Radio Rivadavia.
«Ese modelo se instauró para introducir el socialismo. Esta teoría viene de Gramsci y lo saben muy bien en el Foro de San Pablo. Gramsci decía que hay que entrar en la educación, es decir, adoctrinamiento ideológico. Después venía la cultura y finalmente los medios. Eran las patas del Estado para ponerle guita a los artistas y los medios para bajar un mensaje», continuó el Presidente.
Dando por finalizada el enfrentamiento con la cantante, Javier Milei volvió a dar su mirada sobre lo ocurrido en el Congreso con el regreso a comisión de la Ley Ómnibus: «Fue un éxito político. He propuesto un reordenamiento político. Si tenés gente que tira para un lado y otro para otro lado, te encontrás siempre en el mismo lugar», destacó.
«Quedó ordenado el tablero. Qué chances teníamos de sacar una ley si nos metíamos con los negocios de la política con 38 diputados. A mí no me parece trivial que la ley haya funcionado como principio de revelación, donde quedaron de un lado quienes luchan por la libertad y otros que defienden los intereses políticos», concluyó el primer ministro argentino.
