Martín Menem explicó lo que pasó el pasado martes en el Congreso de la Nación cuando se decidió que la Ley Ómnibus regrese a comisión. El presidente de la Cámara de Diputados apuntó contra los legisladores que se habían comprometido a acompañar el proyecto y, finalmente, lo hicieron en contra. Además destacó que el Gobierno tiene un «plan B».
El elegido por Javier Milei para dirigir la Cámara baja explicó por qué se decidió levantar la sesión en la jornada del martes: «Se aprobó en general y, cuando se votó en particular, empezaron a primar los intereses de pequeños sectores que votaron con el kirchnerismo. Le van a buscar la explicación de mil maneras, pero votaron con el kirchnerismo. Lo que nosotros queremos dejar atrás, ellos quieren que continúe», manifestó en LN+.
A pesar de que no estaba confiado en que acompañen el proyecto en su totalidad, admitió que no estaba estipulado la continuidad en los rechazos: «Por ahí había alguna que otra divergencia en algún que otro punto y de repente se votó casi todo negativo en el cuarto artículo. Pequeños gestos que muestran lo que están pensando«, sostuvo Martín Menem.
«Es un gran paquete normativo que ayuda a la economía. Ahí está plasmado lo que Milei dijo que iba a hacer. En campaña dijo que iba a desregular la economía, que iba a privatizar las empresas públicas que generan déficit, inflación, deuda. Son un agujero negro», añadió el riojano encargado de comandar la Cámara de Diputados.
En la misma línea, Menem continuó: «No está bueno que le pongan trabas a un Presidente que recién gana, que tiene el 55%, que dijo lo que iba a hacer, que la gente ratifica eso y un grupo de 250 personas dicen que no a algo que se habían comprometido que sí«.
Sobre el cierre, el legislador aclaró: «No hay tres caminos. O dejamos el pasado de una vez por todas atrás y cambiamos 180 grados. Hay algunos que salieron a decir «viva el consenso». La Argentina necesita girar 180 grados e ir hacia otro camino. Cuando te quedás en el camino te pasa lo que le pasó al ingeniero Macri«.