En el marco de un seminario de la Universidad de Harvard, el asesor de Javier Milei, Federico Sturzenegger respaldó firmemente el proyecto del mega Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) y la ley ómnibus, ofreciendo una estrategia contundente para superar la oposición de los «grupos de interés».
«Si lo hacés, tenés una chance de ganarles la pelea», sostuvo el ex presidente del Banco Central durante un debate online titulado «La disruptiva presidencia de Javier Milei: ¿Hasta dónde puede llegar?«, moderado por el politólogo Steven Levitsky y con la participación de académicos argentinos.
En un momento de alta tensión, Sturzenegger defendió la acción del Poder Ejecutivo tras críticas a la visión política y económica del gobierno libertario por parte de los panelistas. El economista argumentó que la legitimidad del presidente está vinculada al mandato de la sociedad para cambiar un sistema que se ha fortalecido en las últimas décadas.
«Argentina es demasiado estable. La persistencia de líderes sindicales y empresariales, todos varones, revela un status quo que favorece la extracción de rentas en su favor», expresó Sturzenegger, destacando la necesidad de transformar un sistema arraigado.
Refiriéndose al mega DNU, el asesor presidencial afirmó que «hay muchas más discusiones sobre el contenido que sobre la forma«. Desglosó las bases del decreto, destacando el enfoque en incrementar la competencia y proporcionar libertad a la sociedad. En cuanto a la ley ómnibus, resaltó su potencial como la mayor reforma educativa en 50 años, abarcando diversos sectores.
En el análisis de la caída del proyecto de ley, Sturzenegger señaló que el tratamiento parlamentario se vio afectado por «una pelea sustancial por fondos fiscales» con los gobernadores. A pesar de ello, subrayó la positividad de la negociación democrática, destacando la diferencia con la mayoría kirchnerista en el Congreso.
En conclusión, la postura de Sturzenegger resalta la importancia de estas iniciativas para transformar un sistema arraigado, mientras la controversia y el diálogo democrático continúan marcando la escena política argentina.
