Gustavo Sáenz se refirió a los ataques recibidos por parte del Gobierno nacional tras el revés en el Congreso. El regreso a comisión de la Ley Ómnibus marcó un fuerte enfrentamiento entre los gobernadores y Javier Milei. Uno de los apuntados fue el gobernador salteño. Sin embargo, Sáenz aclaró que en el Ejecutivo estaban al tanto que no iban a acompañar el proyecto en su totalidad.
A casi dos semanas de que le Ley Ómnibus quedara trunca en la Cámara de Diputados, sigue la tensión entre las provincias y la Casa Rosada. Tras el resultado adverso en el Palacio Legislativo, el Gobierno decidió tomarse «revancha» y tildó de «traidores» a diferentes gobernadores. La ira del jefe de Estado lo llevó a cortar el subsidio al transporte para todos los distritos.
Ya con la confrontación en los niveles más altos, el gobernador de Salta se encargó de explicar el error que cometió el Presidente: «Acompañamos desde el primer momento al Gobierno nacional elegido democráticamente en darle las herramientas necesarias. Pero también habíamos planteado que había cosas que íbamos a acompañar y otras que no. El Congreso no es una escribanía del Gobierno«, manifestó en Radio Mitre.
Como venganza, en el Ejecutivo decidieron correr a Flavia Royón de la Secretaría de Minería. Esta cuestión molestó a Gustavo Sáenz, quien no ocultó su desacuerdo: «No hay nada más injusto que eso, porque no tiene nada que ver con un acuerdo político. Se ve que ya tenía la decisión tomada. Evidentemente, tendría otros compromisos. Es una gran pérdida para el sector privado, porque es una mujer preparada«, subrayó.
«Si el pecado de ella es ser salteña, ser conocida mía y haber trabajado conmigo, es lamentable que esto suceda. Si lo que estamos buscando es eficiencia, profesionalismo, gente capacitada… Pero si lo que están buscando es repartir cargo para reordenar y reorganizar el Gobierno, no es lo correcto«, agregó el salteño.
Como cierre, el mandatario provincial recalcó que desde Casa Rosada solo tuvieron «agravios, insultos y descalificaciones». “Veo que Milei no le gusta cuando uno opina distinto, sobre todo en economía. Le pido que nos respete a nosotros. Hay muchas cosas que hay que cambiar en la Argentina para que sea un país federal”, sentenció Gustavo Sáenz.