El jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, reveló que los destrozos ocasionados durante la marcha en contra de la Ley Ómnibus tendrán un impacto económico de 107 millones de pesos para la Ciudad de Buenos Aires. En ese sentido, Macri detalló los gastos necesarios para reparar las zonas aledañas al Congreso, escenario de violentos incidentes.
Macri expresó su preocupación por los cuantiosos daños causados durante la manifestación, destacando que los responsables asumirán las consecuencias económicas de sus acciones. El vandalismo, que incluyó pintadas, daños en mobiliario urbano, y la alteración del orden público, generará importantes gastos en reparaciones y limpieza.
Según las estimaciones proporcionadas por el dirigente del PRO, la restauración de la zona afectada requerirá una inversión significativa. Entre las principales tareas a realizar se encuentran la reposición de contenedores y tachos de basura incendiados, la reparación de elementos de alumbrado público, vidrios de farolas, buzones, baldosas, cordones de veredas y la eliminación de grafitis, entre otros.
El monto total estimado para cubrir estos aspectos asciende a los 81.890.000 pesos. Además, se identificaron daños en el mobiliario urbano, como refugios de colectivos, postes de paradas y pantallas publicitarias, junto con 316 metros cuadrados de veredas deterioradas. Para abordar esta situación, se implementó un plan de trabajo que involucra a 60 barrenderos, 4 hidrolavadoras, 4 camiones recolectores, 10 inspectores y 3 equipos especiales de limpieza de acción inmediata. Esta iniciativa adicional conlleva un costo de 25 millones de pesos.
El compromiso de Jorge Macri
Jorge Macri enfatizó su compromiso en restaurar la zona afectada y devolverla al estado que los porteños merecen. Asimismo, señaló que se hará cumplir la responsabilidad económica de aquellos que participaron en los actos vandálicos. Durante los incidentes, los manifestantes provocaron daños severos, rompiendo veredas y lanzando proyectiles contra las fuerzas de seguridad.
Las detenciones durante los tres días de protestas ascendieron a 18 personas, según Patricia Bullrich, mientras que el ministro de Seguridad porteño, Waldo Wolff, confirmó que solo el viernes se detuvieron a 13 personas, incluyendo un menor de edad. Los vecinos de la zona de Congreso, acostumbrados a convivir con manifestaciones frecuentes, expresaron su preocupación por el deterioro constante del área, destacando problemas como olor a orina, tachos rotos, basura en las veredas, y actos de vandalismo que afectan la calidad de vida en la zona.