Los cuatro jugadores de Vélez Sarsfield que están acusados de abuso sexual a una joven periodista de 24 años en Tucumán quedaron detenidos. Este lunes, la denunciante se sometió a una entrevista en cámara Gesell y tras la intervención, se decidió que los futbolistas acusados queden en detención en Tucumán durante al menos dos días.
«Sebastián Sosa, Abiel Osorio, José Florentin y Braian Cufré quedaron detenidos tras la Cámara Gesell con la mujer que denunció el abuso. Este miércoles el juez tendrá que decidir si los 4 jugadores de Vélez siguen en esa condición o son liberados«, informó el periodista César Merlo en TyC Sports. Los futbolistas habían sido denunciados por la periodista tras el partido entre Vélez y Atlético Tucumán hace unas semanas.
En la denuncia de la joven periodista, apunta a que Sosa la contactó para ir al hotel, donde se encontró con los demás jugadores de Vélez. Pero la versión de Sosa tiene otro tono, según indicó hace unos días su abogado. «Sebastián Sosa lo único que recuerda es que se durmió», dice su abogado, Ernesto Baaclini. «Él se fue a dormir. Hubo una conversación amable. La denunciante relata que él estaba durmiendo», aseguró en diálogo con DSports.
De todos modos, el abogado no quiso confirmar si Sosa se encontraba en la habitación donde se produjo el hecho denunciado. Y dio detalles de lo que podría ocurrirle a su defendido. «Si es por el delito principal la pena máxima es de 20 años. La semana que viene, Sosa deberá ir a declarar a Tucumán. Estamos sujetos a lo que se diga en la Audiencia Pública. Ahí se puede solicitar la quita del pasaporte o el arresto domiciliario. Él se siente mal, está compenetrado en este tema. Cree que va caminando y todo el mundo lo va señalando. Eso siente una persona de bien que le está ocurriendo esto», detalló.
Los chats de Sosa y la denunciante
«Soy Seba, ¿entonces te venís al hotel y tomamos algo acá?», reza uno de los mensajes entre Sosa y la denunciante, según reveló Telenoche. Luego de acordar la dirección, el uruguayo le dice a la víctima que vaya a su habitación: «Mandate derecho a la 407. Avisame cuando llegues, que te aviso que esté todo despejado». Pero tras el encuentro, Sosa se mostró en un tono diferente. «Pasaste un buen momento y listo. No te amargues». A lo que la denunciante refutó. «Lo que hicieron ayer fue muy fuerte. Eso no se le hace a ninguna mujer».