Papu Gómez es protagonista por estos días por la sanción durísima que recibió por un caso de dopaje y que lo tiene sin jugar desde el año pasado. El campeón del mundo con la Selección Argentina intentó apelar, pero le rechazaron el pedido y deberá seguir esperando dos años para volver a jugar. Pero además de ello, otro futbolista histórico de Argentina lo recordó. Y no de buena manera.
Lucas Biglia es uno de los jugadores que formaron parte de la Selección Argentina en la última década. Integrante del equipo subcampeón en el Mundial 2014 y en las Copas Américas de 2015 y 2016, Biglia se despidió de la camiseta argentina en Rusia 2018. Un mundial al que llegó en mala forma física tras sufrir una dura lesión producto de un golpe del Papu Gómez en un partido en Italia. Y que no olvida.
El cruce con Papu Gómez
«¿Sabés cuándo me lo volví a cruzar? Hace 20 días, en un torneo de pádel. Mi hijo lo ve y me dice, ‘papá, me quiero sacar una foto con el Papu'», contó Biglia en diálogo con La Nación. Allí, el exIndependiente dejó a su hijo cumplir su deseo, pese al rencor con su excompañero de la selección. «¿Qué le iba a decir, que no porque una vez me rompió todo?».
«El ‘Papu’ le dijo a un amigo sobre mí que estaba todo bien, que estaba bien conmigo. Él dijo eso…, pero jamás me mandó ni un mensaje ni me llamó nunca», contó Biglia, que todavía espera que aclare lo que pasó. «Y ya pasaron seis años. ‘Loco, mirá, te pido mil disculpas’, algo así me podía haber dicho. Yo no soy rencoroso, pero si te portas así, tengo que pensar que no lo hiciste de buena fe», agregó. Aunque su hijo no tuvo que pagar el precio. «Alessio quería la foto… y tiene la foto».
Biglia y el recuerdo de Chiqui Tapia
Además, en la entrevista, Biglia reivindicó la labor de los jugadores de su generación, que no pudieron ganar títulos con Argentina, pero dejaron una estructura en la selección. Y ayudaron al ascenso de Chiqui Tapia en la AFA. «Nadie se dio cuenta de que nosotros ayudamos a que ‘Chiqui’ Tapia se fuese haciendo presidente de la AFA», dijo Biglia.
«Le decíamos: ‘Chiqui, nosotros creemos que vos tenés que mejorar el predio de la AFA para que sea cada vez mejor’. Hoy vas al predio y está mejor que el predio de cualquier selección europea. Nosotros fuimos bancando, ayudando a crecer a esa nueva AFA para darles cada día más comodidades a los jugadores que están hoy. A nosotros nos tocaron cuatro años de mierda, en los que tratamos de ayudar a Chiqui que venía de la muerte de Grondona, de la votación esa ridícula, de la Comisión Normalizadora que fue el desastre más grande de la historia del fútbol argentino… ‘Chiqui’ venía de conducir un club, que no es lo mismo que la Asociación», recordó Biglia.
