Se quedaron todos con la boca abierta y sin poder creer lo que estaban escuchando. Todo esto sucedió en DDM, el programa que lleva adelante Mariana Fabbiani a través de la pantalla de América TV. Allí, se escuchó la palabra de Fabiana Araujo, quien decidió exponer en vivo lo que atravesó con su marido.
Esto tiene que ver también con el síndrome de Guillain-Barré que superó. «Has pasado de todo, Fabiana… ¿Qué aprendiste en este último tramo de tu vida? Fueron siete años muy duros, tu último matrimonio del que te costó salir, esa cárcel que termina saliendo tu propia pareja», quiso saber la conductora.
«Primero con ayuda… también con las equivocaciones del otro lado. Yo nunca sufrí violencia física, fue psicológica, emocional. Yo me enfermé. Pero si de pronto te dan una cachetada es obvio que es violencia. Esto es sutil… manipulación. Empieza de abajo, te van mintiendo, te van sometiendo, todo lo que vos decís es una bolud*z, si no estás de acuerdo con el otro sos una bolud*, o estás loca, o sos histérica», comentó.
«Te tratan de idiota, todo te lo niegan, todo te lo justifica. Cuando el otro te grita, te menosprecia, te insulta, lo justificás. La vida te va poniendo banderas amarillas, anaranjadas, rojas. Cuando le hacés caso a ninguna alerta, viene la alarma para que te des cuenta», aseveró Fabiana Araujo delante de Mariana Fabbiani.
«El síndrome de Guillain-Barré fue como mi respuesta. Yo me enteré al año de estar casados de que él se había ido a correr a una maratón con una exnovia. Él me lo negaba, yo tenía los pasajes, todo. Esa parálisis que a mi me produjo eso de no saber a dónde ir… Se me paralizó el cuerpo», comentó.
«Me agarró un síndrome que me dejó paralítica en una cama, con 21 días de internación, de terapias. Un síndrome autoinmune. Yo me lo produje. No me di cuenta en ese momento. Uno siempre trata de racionalizar y volver a justificar. Uno quiere creer. Yo quedé devastada después de esa enfermedad, no podía caminar. Tuve que volver a caminar, pero hasta el día de hoy tengo muchas secuelas, mucho dolor», señaló en medio de mucha angustia.
