Los cuatro jugadores de Vélez denunciados por abuso sexual a una periodista en Tucumán siguen transitando el proceso judicial. Luego de conocerse que tres de ellos, Abiel Osorio, José Florentín y Braian Cufré, pueden seguir el proceso en prisión domiciliaria, mientras que Sebastián Sosa en libertad, ahora se dio a conocer parte de la declaración de la víctima en una audiencia con los jugadores denunciados.
«Yo acepto voluntariamente ir a un hotel con cuatro personas. Poniendo textualmente que no se desubiquen», arranca la declaración, citada por el periodista Martín Candalaft en Radio La Red. Según los dichos de la joven de 24 años, la periodista reconoce haber accedido al encuentro con los futbolistas en el hotel en Tucumán, pero nunca dio consentimiento a lo que luego denunció como abuso.
«Yo nunca digo, sí, fiesta loca para todos. Nunca fueron mis palabras», dijo la joven. «Me quisieron desacreditar con la frase en el mensaje que estas cosas las hago sola. Siempre que trato con un futbolista yo me manejo sola y en privacidad. Nunca quise que mi vida periodística y privada se confunda con este hecho. Yo di mi consentimiento para ir voluntariamente. Pero todo lo que pasó después no estuvo consentido. Todo lo que sigue después no lo acepto», aseveró.
La denuncia contra los jugadores de Vélez
Además, si bien el arquero Sebastián Sosa aparece como el menos complicado, ya que pudo acceder a la liberta provisional y está imputado como partícipe secundario, la denunciante apuntó contra él. «El señor Sosa me seguía manipulando por chat con que había sido un buen momento. A mí me parece muy injusto que estas personas siguen con impunidad cuando mi vida es una cárcel y un infierno», denunció la periodista contra los jugadores de Vélez.
De momento, el único de los cuatro imputados en libertad es Sosa, que ya pagó la caución de 50 millones de pesos y puede seguir el trámite procesal en su domicilio de Buenos Aires, aunque sin salir del país y con visitas frecuentes a Tucumán. El resto de los jugadores imputados debe fijar domicilio en Tucumán y allí estarán durante 90 días mientras se espera el juicio.