Las entrevistas emotivas están a la orden del día en el programa de Mariana Fabbiani y se escuchó un relato muy fuerte en la última emisión del «Diario de Mariana». Sucede que la periodista Fabiana Araujo quiso compartir su dura historia de vida y dar un mensaje alentador a quienes se sientan representados por su relato.
«Fueron siete años muy duros los que viviste en este último matrimonio, del cual te costó salir, esa cárcel que resultó ser tu pareja..», dijo Mariana en la introducción del reportaje. «Sí, me costó mucho salir. Se sale con ayuda, solo no se sale. La psicoterapia, los amigos… y también las equivocaciones del otro lado», reconoció Araujo frente a las cámaras de América TV.
Posteriormente, la famosa acotó: «Debo aclarar que no sufrí violencia física, yo sufrí violencia psicológica y también me enfermé. Esto es manipulación, te va socavando, te van mintiendo, te van sometiendo, todo lo que vos decís es una boludez, o si no estás de acuerdo con lo que el otro propone sos una boluda, cuando el otro te miente te dicen ‘vos siempre controlando’… Te lo terminás creyendo, te crees las argumentaciones del otro. Cuando el otro te menosprecia, te insulta, empezás a pensar que tiene razón, decís él tiene razón, yo me lo merezco».
La determinante decisión de Fabiana Araujo
La columnista y modelo le comentó a Mariana Fabbiani que su exmarido la culpó de la enfermedad que desarrolló y eso desató el quiebre definitivo en el vínculo: «Ahí dije basta y encima me echó de su casa, una vez más. Entonces dije basta, no vuelvo nunca más. Y lo hice. Pero él empezó su plan de reconquista, llegó a ponerse de rodillas y hay que ser muy fuerte para no volver a caer».
El temperamento violento siempre se manifestaba, no conmigo sino con la chica que trabajaba en casa, el mesero, el piletero, el conductor de otro auto, con la ex mujer, con la madre… Mirando para atrás todo cierra. Pero además tenía un entorno de amigos que le permitían todo, decían ‘el es así’. Estamos hablando de una personalidad narcisista, manipuladora», agregó y finalizó con el testimonio.