El Gobierno nacional atraviesa uno de sus días más tensos por las altas probabilidades de que el Senado rechace el Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023 de Javier Milei. El oficialismo no logra juntar los votos necesarios para pasarlo y, aunque trataron de postergar el tratamiento del DNU, la oposición inclinó la balanza a su favor. Queda entonces saber qué pasa si el recinto logra rechazar el DNU.
En primera instancia, si el Senado no aprueba el decreto, este seguirá teniendo vigencia. La Ley 26122, según precisó Chequeado, exige que ambas cámaras rechacen la iniciativa del Poder Ejecutivo. Por lo tanto, le quedará pasar por la Cámara de Diputados para su evaluación.
Si la Cámara baja aprueba el decreto o no lo trata, la normativa continuará vigente. “El Congreso puede rechazar un DNU con el voto mayoritario en cada una de las cámaras. Por consiguiente, si el Presidente no quiere ver rechazado un DNU, tiene que asegurarse el apoyo mayoritario por lo menos en una de las 2 cámaras”, explicaron desde el mismo medio.
En el caso que el decreto sea aprobado, no hará falta que pase por Diputados. Ahora bien, si la Cámara alta plantea la derogación, la Cámara baja quedaría en condiciones de tratarlo “en cualquier sesión”, aunque para ello el oficialismo tendrá que asegurarse el voto de la mayoría.
¿Vuelve la Ley de Alquileres?
Un retroceso para el Gobierno sería la vuelta de la Ley de Alquileres, ya que uno de los artículos del megadecreto de Javier Milei incluía la derogación total de la Ley 27.551 sancionada en julio de 2020 y sus cambios introducidos en octubre de 2023, que reducía los plazos de actualización de un año a seis meses.
El DNU no modifica los contratos establecidos en ninguno de los dos periodos. Sin embargo, si se rechaza en el Congreso y vuelve a estar vigente la ley, lo mismo pasará con los contratos firmados desde el 29 de diciembre bajo al DNU y el Código Civil y Comercial, por lo que los inquilinos tendrán que negociar nuevamente con los propietarios para acordar pautas dentro de la Ley.