Antes de reunirse con el presidente Javier Milei, este viernes el mandatario de Paraguay, Santiago Peña, pidió volver al liberalismo puro, pero remarcó que «el Estado tiene un rol fundamental». Peña se definió como un liberal tradicional, «aquel que inició buscando en la libertad del hombre, que lastimosamente se fue desviando, primero en el socialismo, que fue un fracaso, y en el neoliberalismo, que fue otro fracaso».
«Hay que volver a las raíces, al liberalismo puro que era buscar la libertad del ser humano total, pero el Estado tiene un rol fundamental que es cuidar y corregir algunas de las fallas que tienen los mercados», afirmó el paraguayo en Radio Rivadavia.
Asimismo, indicó: «Soy presidente electo de un partido tradicional, el colorado, estuve afiliado al partido liberal durante 20 años. Soy una expresión de un partido tradicional de 140 años, pero que ha sabido entender qué es lo que la ciudadanía demanda».
«Valoro lo que está haciendo, creo que es un esfuerzo enorme y creo que el pueblo argentino manifestó que quiere un cambio», sostuvo sobre el presidente argentino. También destacó que Milei «tiene una determinación de hierro» y argumentó que «cuando uno se anima a aventurarse a la carrera política, el arte de lo posible, muchas veces el camino no es recto y lo veo con una determinación tremenda».
Inflación e Hidrovía
Peña destacó que Paraguay logró llegar a la inflación 0 y que la economía está creciendo en torno al 4%. Además, hizo énfasis en la disminución de impuestos para aumentar la recaudación, por lo que estableció tasas máximas impositivas. «No podés subsidiar de por vida, se le da transferencias para que se ocupen de romper el círculo de la pobreza. Es inaceptable que en Paraguay haya niños con hambre. Estamos en un 25%, y en estos 20 años disminuyó a la mitad», remarcó.
Uno de los temas que Peña abordará con Milei será el conflicto por la hidrovía, por lo que en la previa, adelantó: «Paraguay reconoce que la Argentina hace inversión sobre el canal. Reconoce que el cobro del peaje es una posibilidad, pero quiere que sea parte de un acuerdo, respetando un tratado internacional que rige para cinco países (Uruguay, Brasil y Bolivia)».