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SOCIEDAD

Crimen de Fernando Báez Sosa: el padre de un rugbier aseguró que siente «indignación» por la pena que recibió su hijo

Uno de los padres de los asesinos de Fernando Báez Sosa aseguró que su hijo está pagando una pena que no corresponde a causa de su inocencia.

Fernando Báez Sosa

En una entrevista con Telenoche, Eduardo Benicelli, padre de Matías, uno de los jóvenes condenados por el crimen de Fernando Báez Sosa, rompió el silencio y defendió la inocencia de su hijo. Sus palabras, cargadas de emotividad y convicción, revelan el dolor y la lucha de una familia ante el crimen que tuvo lugar en Villa Gesell.

Benicelli enfatizó la inocencia de su hijo al afirmar: «Mi hijo no mató a Fernando, te aseguro que no. Es lo primero que me dijo la primera vez que lo vi en prisión, y le creo». Estas palabras reflejan la convicción del padre en la versión de su hijo y su deseo de justicia.

El relato sobre su primer encuentro con Matías en la cárcel revela la angustia y la indignación que siente ante la situación: «Siento indignación y bronca. Le pusieron un apodo que nada que ver, y después la palabra asesino es muy fuerte. En una charla muy personal, me dijo que está seguro que no lo mató. La Justicia puede decir algo, pero los hechos dicen otra cosa«.

El momento en que se enteró del crimen de Fernando, narrado por Eduardo, pone de manifiesto el shock y la incertidumbre que experimentó: «Fue a la mañana. Mi señora viene a mi lugar de trabajo y me dijo que Mati no llamó para avisar que había llegado. Le dije ´negra, no seas dramática, él sabe que me tiene que llamar´. Al rato vuelve y me dijo que hubo una pelea en Gesell y que había un chico muerto, en un primer momento pensé que era él».

La decisión de cambiar de abogado, según Eduardo, busca una representación más efectiva para su hijo: «Hugo Tomei no lo representó de manera correcta porque si lo hubiera hecho tendría otra pena». Además, expresó su deseo de que la verdad salga a la luz: «No sé quién fue o quién no fue, pero sé que mi hijo no fue».

Las palabras de Eduardo Benicelli reflejan el dolor, la angustia y la búsqueda de justicia de una familia que se ve envuelta en una tragedia inesperada. Su testimonio, cargado de emotividad y convicción, deja en claro que la lucha por la verdad y la inocencia de su hijo Fernando sigue siendo su principal objetivo.