Un fuerte relato sacudió a la televisión argentina esta semana: el periodista Juan Pedro Aleart denunció en vivo en el noticiero del mediodía de Rosario que él y sus hermanos fueron víctimas de abuso sexual durante toda su infancia. Movilizado, Luis Ventura reveló en A la tarde, el ciclo conducido por Karina Mazzocco para América TV, dio a conocer lo que sufrió cuando tenía tan solo seis años.
“Yo he vivido muchas de estas experiencias, primero por familiares. Yo tengo una familia muy numerosa. Y lo he vivido yo en carne propia, fui abusado con seis años. Cada uno lo vive como puede y como lo dejan y lo saca a lo mejor en el momento menos pensado”, comenzó Luis Ventura.
El periodista también recordó cuando habló públicamente sobre el tema por primera vez, en una entrevista con Alejandro Fantino. “Cuando termina el programa de Fantino, me llama mi hermano, el menor y me dice que a él le había pasado lo mismo con el hermano del que me abusó a mi. Curas”, continuó Luis Ventura, sumamente movilizado.
“Después entrás a hacer un derrotero de situaciones y te das cuenta de que el abuso no terminó ahí. El abuso terminó o continuó con ese mismo cura, que yo lo había tenido en primer grado y después lo tuve en tercero, buscándome excusas de conductas…”, agregó Luis Ventura, antes de contar que uno de sus hijos también fue hostigado por un director del colegio al que asistió.
“Yo recién hablé en lo de Fantino. El silencio no tenía que ver con un tema mío, tenía que ver con un miedo de mi viejo. Yo tenía miedo que si mi viejo llegaba a saber algo de lo que me había pasado, creo que ese cura… olvidate. Me bajó los pantalones siendo un niño de seis años. Si mi viejo se enteraba, olvidate. Además, mi viejo era de la vieja guardia, esos tipos que arreglaban las cosas de frente”, recordó el periodista.
«Me ponía en situaciones de rebeldía. Por ejemplo, aparecía rayado mi banco, entre otras cosas. Mi viejo no sé qué habrá hablado con el cura, pero lo fue a ver y terminó todo. Nunca más me jodió, nunca más nada”, agregó sobre lo que le hacía el cura. “No me lo olvido más. Yo quedé paralizado. Nunca esperé esa invasión a mi intimidad, de bajarme el pantalón y dejarme en bolas. Me dejó desnudo. Y yo espiando a ver si entraba uno y me veía desnudo. Lo peor para mí era el pudor, no imaginé otro riesgo porque no tenía conciencia. Era un cura, tenía sotana”, concluyó Luis Ventura.