Luego de que la Justicia ordenara el allanamiento del gerente general de Nación Seguros, Mauro Tanos, el Gobierno nacional le pidió la renuncia al funcionario sospechado de estar involucrado en el escándalo de la contratación de seguros de la ANSES. El funcionario está sospechado de ser el nexo con la firma productora de seguros San Ignacio, una de las que intermedió en la millonaria póliza de la ANSES.
Durante la administración de Alberto Fernández, Tanos se había desempeñado como gerente comercial del sector público en Nación Seguros. Luego, con la llegada de Javier Milei a la Presidencia, fue ascendido a gerente general de la compañía. También quedó imputado el actual gerente de compras de Nación Seguros, Marcos Federico Eufemio.
La documentación que obra en el expediente judicial muestra que Tanos ofició como contacto con la firma San Ignacio. Se trata de una empresa que cobró millonarias comisiones por la contratación de la póliza de la Administración Nacional de la Seguridad Social.
En la serie de allanamientos ordenados por la Justicia también se incluyeron los domicilios de Brian Kelly y Hernán Marcos Bressi, presidente y director suplente de San Ignacio. Días atrás, Alberto Fernández había salido a referirse al escándalo a través de sus redes sociales. En algunos reportajes, salió afectado por la destrucción de su principal caballito de batalla, la honestidad de su gestión.
Para eso, además de desmentir las versiones públicamente, levantó el teléfono y se comunicó con Milei, quien -aseguran- lo escuchó y aceptó los argumentos técnicos que ofreció ante cada una de las acciones que lo llevaron a la firma y la instrumentación del cuestionado decreto 823/21.