En un giro inesperado, el presidente Javier Milei ha firmado el Decreto 337/2024, devolviendo el rango ministerial al secretario de Prensa, Eduardo Serenellini, apenas diez días después de que se le rebajara su jerarquía. Esta decisión, publicada el viernes en el Boletín Oficial, marca un cambio significativo en la estructura gubernamental.
La medida, justificada por la necesidad de adecuar la jerarquía del titular de la Secretaría de Prensa de la Presidencia de la Nación, según el texto del decreto, ha sido respaldada por todo el Gabinete de Ministros. Se espera que esta restauración de rango no solo tenga un impacto económico debido al consecuente aumento salarial para Serenellini, sino que también le otorgue mayor autonomía y un cuerpo más amplio de colaboradores.
Este movimiento sigue a la reciente ascensión de Manuel Adorni al puesto de vocero presidencial, lo que sugiere una reorganización dentro del gobierno. Sin embargo, este cambio no ha estado exento de controversias, ya que se produce en medio de gestualidades internas que buscaban incomodar al periodista, incluyendo la pérdida de influencia al quedarse sin el área de Comunicación del Gobierno en febrero.
El retorno de Serenellini al rango ministerial es una señal de que, a pesar de los desafíos internos y los cuestionamientos sobre su desempeño, su papel en la administración sigue siendo relevante.
Este movimiento podría tener implicaciones significativas en la dinámica interna del gobierno y en su estrategia de comunicación en los próximos meses.
