El Concejo Deliberante de Mar del Plata prohibió a través de una normativa las motos ruidosas que circulen por la ciudad. En vistas de buscar un ambiente más ameno en la Costa Atlántica, los concejales dispusieron la sanción a los conductores que no cumplan, que puede incluir el secuestro del vehículo en cuestión.
A través de una ordenanza aprobada por unanimidad, se prohíbe el uso de caños de escape ruidosos en motocicletas. De esta forma, se promueve la protección contra la contaminación sonora y un mayor bienestar para las personas, en espacial para aquellas con trastornos del espectro autista o hipersensibilidad.
La normativa también abarca a aquellas motos que generen ruidos molestos debido a problemas de aceleración, desgaste o la ausencia de un silenciador adecuado. La tarea de supervisar el cumplimiento de esta ordenanza recae en la Subsecretaría de Inspección General, en colaboración con las autoridades de Transporte y Tránsito, según indicaron distintos medios.
Además de la sustracción del vehículo, se impondrán multas que oscilan entre uno y diez salarios mínimos del personal municipal. En marzo, fue establecido en $357.018, con un máximo de $3.570.186. En caso de reincidencia en el mismo delito dentro de un año, la multa será duplicada.
Los controles se llevarán a cabo de manera rigurosa. Se podrán, por ejemplo, utilizar fotografías o videos como evidencia para la emisión del acta contravencional. Sin embargo, se establecen excepciones para aquellos vehículos que participen en actividades temporales y cuenten con el permiso correspondiente.