Este jueves, el paro nacional de CTERA y la movilización al Congreso tuvieron momentos de tensión cuando efectivos de la Policía de la Ciudad y manifestantes docentes forcejearon ante la decisión de la Fuerza de Seguridad de aplicar el protocolo antipiquetes.
Según informó NA, la decisión de los uniformados porteños fue dispuesta cuando los docentes intentaron cortar la avenida Entre Ríos, a la altura de Rivadavia, frente al Palacio Legislativo. Frente a ello, los efectivos de la Guardia de Infantería de la Policía de la Ciudad comenzaron a empujar a los manifestantes e incluso arrojaron gas pimienta.
«Los docentes no llegan a fin de mes. El problema que nosotros estamos teniendo es que nuestros compañeros no tienen aumentos de salarios. No se fijó un piso salarial. Por primera vez en la historia negociaron primero las provincias y después la nación. Aumentaron los alquileres, el transporte y la canasta alimentaria. Los docentes siguen ganando lo mismo que a mitad de año del año pasado, es insostenible», resaltó la secretaria general de CTERA, Sonia Alesso.
Modificar la ley de educación
Juan Marino, diputado de Unión por la Patria, denunció en la comisión de previsión social que fue atacado por un policía sin identificación cuando salió del Congreso para pedir explicaciones sobre el operativo. A la par de la protesta de CTERA, el Gobierno anticipó que enviará al Congreso un proyecto para modificar la Ley de Educación y penar el «adoctrinamiento» en las escuelas.
Así lo dio a conocer el vocero presidencial, Manuel Adorni. También, puntualizó que el Ministerio de Capital Humano se va a encargar de «poner a disposición un canal para que los padres y alumnos puedan denunciar el adoctrinamiento y la actividad política que no respetar la libertad de expresión. Van a poder denunciar cuando sientan que no se esté respetando el derecho a educarse».
Carlos Fuentealba
La fecha del paro coincide con un el aniversario del asesinato del maestro Carlos Fuentealba, el 4 de abril de 2007. Como parte de los reclamos, CTERA expresó que «rechaza el protocolo de seguridad del Gobierno nacional, que criminaliza la protesta social». En Neuquén, la Asociación de Trabajadores de la Educación (ATEN) adherirá a la medida. Realizará un acto en Arroyito, al sur de la capital provincial, donde se llevó a cabo el operativo represivo que mató a Fuentealba.