Los gobernadores decidieron negociar su propio «pacto federal» para marcarle la cancha a Javier Milei antes del que quiere firmar el presidente el 25 de mayo. El gobernador de Chubut, Ignacio Torres, es quien encabeza la movida y ya habló con el santafesino Maximiliano Pullaro y el santiagueño Gerardo Zamora.
«Quieren meterle más profundidad a los 10 puntos del Pacto de Mayo», explicaron a La Política Online fuentes al tanto de las conversaciones. Entre los ítems que incluirán los gobernadores en su propio pacto estarán la coparticipación, los impuestos, el federalismo fiscal, la agenda educativa y los temas productivos. El documento se presentará luego de que el Senado termine de tratar la Ley Bases.
Por otro lado, junto a torres, sus pares Rolando Figueroa de Neuquén, Alberto Weretilneck de Río Negro, Claudio Vidal de Santa Cruz, Gustavo Melella de Tierra del Fuego, y Sergio Ziliotto de La Pampa, decidieron coordinar acciones. Un punto destacado de la contrapropuesta patagónica es la creación de una Agencia de Desarrollo, que unirá a las provincias en un esfuerzo coordinado para potenciar la actividad económica en función de los recursos y capacidades de cada región.
La propuesta se centra en la redistribución fiscal, ya que los gobernadores patagónicos piden que más impuestos sean coparticipables, ampliando así la porción de recursos que reciben las provincias frente al Estado Nacional.
El «Pacto Federal» impulsa la defensa de la educación pública, que sufrió recortes en fondos como el FONID y el presupuesto universitario. Los gobernadores patagónicos «exigen» un apuntalamiento de la educación pública con mayores recursos federales.
