Martín Lousteau, senador de la Unión Cívica Radical (UCR), ha emitido una serie de demandas en medio del debate estancado en el Senado sobre la Ley de Bases y el paquete fiscal. Lousteau, cuyo voto se considera vital para el avance de los proyectos del oficialismo, ha delineado tres cambios específicos para aceptar las reformas: primero, que haya aumentos a las jubilaciones, segundo más financiamiento a universidades públicas y tercero continuar las obras públicas paradas.
En un video compartido en sus redes sociales, Lousteau expresó: «Hay tres cosas que faltan en el paquete fiscal y en la ley de Bases. La primera es una recomposición de las jubilaciones y pensiones, que perdieron un gran porcentaje desde que asumió este gobierno. La segunda es un financiamiento a las universidades, los gatos de funcionamiento cayeron mucho y tienen riesgo de poder seguir continuando».
«Por otro lado, Argentina está repleto de obras públicas pequeñas a las que le faltan muy poquito para ser terminadas. Es más caro pararlas y dejarlas caer que terminar el financiamiento», relató el exministro de Economía tratando de negociar su voto a cambio de una serie de propuestas que considera indispensables para mantener el orden en el país.
Lousteau es una de las figuras de la oposición con mayor peso en el Senado
El rol de Lousteau se vuelve aún más relevante en medio de la división de fuerzas en el Senado, donde su voto podría inclinar la balanza hacia la aprobación o el rechazo de los proyectos. Su postura refleja la complejidad y la importancia del debate en curso, donde diferentes senadores buscan equilibrar las necesidades económicas con las demandas sociales y políticas.
Por su parte, el ministro del Interior, Guillermo Francos, ha afirmado que el Gobierno cuenta con los votos necesarios para aprobar la ley Bases en el Senado, aunque reconoce la posibilidad de que surjan modificaciones durante el debate. Esta declaración subraya la confianza del oficialismo en la viabilidad de sus propuestas, aunque también señala la importancia de negociaciones y ajustes para asegurar su aprobación final.
En un contexto donde cada voto cuenta, Lousteau emerge como un protagonista que busca no solo influir en el rumbo de las políticas públicas, sino también promover un diálogo constructivo que pueda conducir a soluciones más inclusivas y sostenibles.