La situación en Misiones se incrementó este domingo en el tercer día consecutivo de protestas frente al Comando Radioeléctrico. Los manifestantes, compuestos por policías activos y retirados de la provincia, se vieron apoyados por docentes y personal de salud, quienes se unieron al reclamo de mejoras salariales. Ante la escalada de tensión, la ministra de Seguridad nacional, Patricia Bullrich, dispuso un Comité de Crisis liderado por. Personal de Prefectura, Gendarmería y Policía Federal para mantener el orden y evitar mayores enfrentamientos.
Desde las primeras horas del día, las Fuerzas Federales, encargadas de contener la situación, formaron un cordón humano para evitar que la protesta se desbordara. Sin embargo, los manifestantes lograron romper el cerco, lo que llevó a momentos de forcejeos y empujones. La quema de neumáticos sobre la Avenida Uruguay, en pleno centro de Posadas, añadió un componente dramático a la protesta.
A pesar del despliegue de fuerzas federales, la situación en la sede del Comando Radioeléctrico continuó siendo delicada. Los líderes de la protesta y el Jefe de la Policía local se reunieron en un intento de encauzar el diálogo y encontrar una solución pacífica. El Jefe de la Policía aseguró que no se buscaba la confrontación y prometió gestionar directamente con el Gobernador para abordar los problemas económicos que afectan a la fuerza policial.
El clima de tensión persiste mientras las negociaciones continúan. Las autoridades esperan que el diálogo permita una resolución pacífica y que no sea necesario recurrir a medidas más drásticas para despejar las calles y restaurar el orden.
Un acuartelamiento similar al que sucedió en Córdoba en 2012
El 3 de diciembre de 2013, la policía de Córdoba protagonizó un acuartelamiento en reclamo de mejoras salariales. Este evento derivó en una ola de saqueos en la ciudad, la segunda más grande del país, generando una situación de violencia e inseguridad.
Los saqueos afectaron a más de 1.000 tiendas, dejando cuantiosos daños materiales y pérdidas económicas. Cientos de personas resultaron heridas en los disturbios, y lamentablemente un individuo perdió la vida. La violencia desatada y la falta de control por parte de las autoridades generaron conmoción y preocupación en aquel momento.
