El dirigente social Juan Grabois criticó duramente al gobierno de Javier Milei por el escándalo que envuelve al Ministerio de Capital Humano, donde se descubrieron 6 mil toneladas de alimentos retenidos en galpones y no distribuidos a los comedores populares.
«Milei tiene una filosofía en la que el ser humano claramente no existe. Por un lado hay indiferencia, por otro lado hay sadismo, por otro lado hay ineptitud, por otro lado hay un desprecio profundo por la vida, que el Presidente lo planteó como parte de su filosofía», afirmó Grabois en una entrevista con Pablo Duggan y el panel de Duro de Domar.
Grabois describió una desconexión entre las redes sociales del gobierno y la realidad de los ciudadanos: «Vos tenés Instagram, Twitter, los actos, los recitales, las fotos, etcétera. Y después hay algo que se llama realidad. Y eso que se llama realidad no está en el panorama de esta gente. La realidad son personas, familias, que puede ser tu hermano, tu hermana, tu abuelo, tu pibe, que hoy no comió o comió una sola vez. Y esa realidad es lo que la política y la militancia tienen que transformar».
El referente de la UTEP también acusó al gobierno de desobedecer un fallo judicial del juez Sebastián Casanello relacionado con su denuncia presentada en febrero: «El Gobierno está en desobediencia del fallo de Casanello«.
Grabois detalló la gravedad de la situación en los depósitos: «Si Pettovello o cualquiera de sus funcionarios se hubiese dignado a ir al depósito de Villa Martelli se hubieran dado cuenta que había alimentos vencidos y otros por vencer. Ahí adentro hay 400.000 kilogramos de leche en polvo, que es oro en polvo en un barrio. Son 4 millones de litros de leche».
Al aclarar su postura, Grabois enfatizó que su lucha no es una confrontación personal con el Gobierno: «No vivo este conflicto con el Gobierno como una pelea de boxeo. El único objetivo acá es que se restituyan las políticas de alimentación».
Finalmente, Grabois hizo un llamado a la ministra de Capital Humano para encontrar una solución al problema: «Le pido a la ministra, como abogado de cientos de comedores, si podemos discutir razonablemente cómo resolver el problema, porque yo no voy a ser libertario nunca, pero no hay que ser ni peronista, ni comunista, ni libertario para poder comprender que hay que repartir comida a la gente que tiene hambre. Tienen que aceptar que es un derecho constitucional».
Las fuertes declaraciones de Grabois han puesto en el centro del debate la gestión del Ministerio de Capital Humano y la necesidad urgente de abordar la crisis alimentaria en los sectores más vulnerables del país.