Donald Trump fue víctima de un intento de atentado en la tarde de este sábado en Pensilvania. El expresidente de Estados Unidos recibió un disparo en la oreja derecha, que por fortuna no resultó letal. Apenas minutos después de conocerse el hecho y en medio de la conmoción, el propio candidato para las elecciones 2024 rompió el silencio. Con crudeza, repasó el momento: «Sentí la bala«, reconoció.
Las palabras de Donald Trump se conocieron en su página Truth Social, donde habitualmente se comunica. Allí se difundió un comunicado firmado por él, solo dos horas después de que fueran los disparos y en medio de la conmoción. «Quiero agradecer al Servicio Secreto de los Estados Unidos y a todas las fuerzas del orden por su rápida respuesta al tiroteo que acaba de ocurrir en Butler, Pennsylvania”, comenzó.
Tras los agradecimientos, que no incluyeron al presidente Joe Biden, hizo un repaso de lo ocurrido. «Fui alcanzado por una bala que perforó la parte superior de mi oreja derecha. Supe de inmediato que algo estaba mal al escuchar un sonido de zumbido, disparos, y de inmediato sentí la bala rasgando la piel«, indicó Donald Trump, en una dramática descripción del hecho que pudo haber acabado con su vida.
En su texto, el exmandatario aprovechó para cuestionar al actual Gobierno, al que enfrentará en las urnas en noviembre. «Es increíble que un acto así pueda ocurrir en nuestro país. No se sabe nada en este momento sobre el tirador, quien ahora está muerto”, planteó. Y como cierre, además de transmitir la solidaridad con su seguidor muerto en medio del tiroteo, indicó: «¡DIOS BENDIGA A AMÉRICA!”.
El video del dramático atentado a Donald Trump
Un video muestra el dramático momento en que el candidato republicano es alcanzado por la bala y se agacha, con la intervención del Servicio Secreto. Sin dudas que los presentes, en el estado de Pensilvania, quedaron estupefactos. Las detonaciones fueron varias, y de inmediato se vio a Donald Trump reaccionar agachándose debajo del atril dispuesto en el escenario y los escoltas de seguridad arrojándose arriba suyo.
También se oyeron gritos de desesperación. Aunque rápidamente el propio exmandatario buscó tranquilizar a todos al mostrarse con el puño en acto. El expresidente tiene 77 años y es el principal favorito de cara a la campaña rumbo a las elecciones de finales de año en que se decidirá quién será el nuevo jefe de Estado del país norteamericano.